La Alcaldía de Ibagué expidió el decreto 0189, con el que implementa un toque de queda entre las 11:00 p. m. y las 6:00 a. m. de jueves a domingo y días festivos, para los menores de edad que estén sin el acompañamiento de sus padres en puntos específicos de la ciudad, esto con la intención de evitar que estén ubicados en espacios donde corran riesgo o puedan ser vulnerados.

El decreto, además, prohíbe el consumo, porte y distribución de sustancias psicoactivas, incluso la dosis personal, en lugares donde hagan presencia menores de edad, como en parques, plazas, plazoletas, escenarios deportivos y culturales y espectáculos al aire libre.

“Es para evitar este tipo de situaciones que han generado varios cierres de establecimientos de comercio en Ibagué (…) es un toque de queda en puntos específicos en defensa de los derechos de niños, niñas y adolescentes en donde puedan ser vulnerados, correr riesgo o puedan ser violentados”, explicó el secretario de Gobierno, Milton Restrepo.

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El funcionario señaló que con los operativos que se vienen realizando en las últimas semanas en donde se ha detectado una alta presencia de menores de edad, se ha percibido cómo los padres de familia estarían dejando recaer el cuidado de sus hijos en las autoridades.

“Los padres de familia han delegado la responsabilidad de crianza en la Administración municipal en cabeza del alcalde, en los rectores, maestros, incluso en la misma Policía. Es inaudito que sigamos encontrando niños, jóvenes o adolescentes en discotecas o bares a altas horas de la noche. No solo generan el cierre de establecimientos, sino que son puestos a disposición de la Policía de Infancia y Adolescencia y, allí, a través de la defensora o comisaría de familia, dependiendo de las circunstancias de tiempo, modo y lugar, pues se aplica un tema de restablecimiento de derechos”, sostuvo Restrepo.