Los hechos de mayor gravedad se registran en el sector de Puerto Rellena, en donde cientos de manifestantes acorralaron a un pequeño grupo de uniformados del Esmad de la Policía.

En videos que circulan en redes sociales se aprecia la magnitud de los estragos: incendios, casas afectadas, personas lesionadas y una cantidad innumerable de piedras y palos sobre la carretera.

“Hay descontrol total en Puerto Rellena, el Esmad está arrinconado”, dice un hombre, que es el que al parecer graba lo que sucedió.

Minutos después de este reporte, el medio Cali Web publicó imágenes en donde se ve que los policías que resistían la embestida de la muchedumbre, no aguantaron más la situación.

“El Esmad se rindió en Puerto rellena y salieron del lugar”, afirmó el medio local, que dijo que en el sitio había unas 600 personas manifestándose.

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En las imágenes se aprecia que aunque los policías caminan en grupo por una calle, algunas personas les lanzan objetos e insultos, y se desconoce si alguno de los uniformados o civiles resultaron heridos.

Esta situación se registra un día después de los desmanes que hubo en la capital del Valle del Cauca, en donde los saqueos, los ataques a buses de servicio público y los enfrentamientos con las autoridades fueron el común denominador de la jornada de protestas por el paro nacional contra la reforma tributaria.

Alcaldía de Cali invita al diálogo para evitar enfrentamientos con Policía

Desde la Alcaldía de Cali, en voz del secretario de Seguridad, Carlos Rojas, se hizo una invitación a los manifestantes y a las autoridades para acudir al diálogo antes que a las agresiones, y se rechazaron los actos de vandalismo que empañaron una jornada de movilizaciones pacíficas.

“El camino debe ser siempre abordar el diálogo y la conversación, porque las contradicciones también tienen un espacio pero no puede ser el vandalismo, el ataque a personas y a infraestructuras que son de alto valor y necesidad para la ciudad”, expresó Rojas.

El funcionario destacó, por medio de un comunicado, que en varios grupos de manifestantes hubo arengas, bailes, cantos y expresiones artísticas, lo que calificó como “un conducto para exteriorizar, al unísono, sus inconformidades sociales y gubernamentales”.

Además, Rojas dijo que en los disturbios que intentaron distorsionar las jornadas de protesta “tiene que haber manos criminales detrás”, pues sospecha que se trató de algo “planificado”.