La Procuraduría ha anunciado su decisión de empezar un proceso de investigación contra algunos guardianes del Inpec, en la cárcel de Palogordo en Girón, Santander. A raíz de las irregularidades descubiertas tras el reciente allanamiento a la celda de alias el Negro Ober, en la que encontraron celulares, licor, drogas y joyas.

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El señalado cumple una condena de más de 40 años y es conocido por haber sido el líder de la estructura criminal ‘los rastrojos costeños’.

Javier Sarmiento Olarte, procurador delegado por los Derechos Humanos, dijo en un comunicado este 27 de marzo que no es posible que sigan ingresando a los centros de reclusión nacionales celulares, licor, alucinógenos y otros elementos que están totalmente prohibidos para los internos.

“Esto no puede seguir ocurriendo de manera sistemática, de manera semanal como lo ha venido alertando la Procuraduría, hacemos un llamado a los 13.450 integrantes del cuerpo de custodia y vigilancia del Inpec para que tomen conciencia de la ilicitud de sus comportamientos”, advirtió Sarmiento.

Por esa razón, advirtió que se iniciará un proceso de investigación por cuenta del caso en cuestión, con miras a que tal situación no vuelva a presentarse y solicitó apoyo a la misma entidad del Inpec, al Ministerio de Justicia y a la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios, Uspec, para que unan esfuerzan en la construcción de un plan definitivo anticorrupción, seguridad e inteligencia; con el apoyo de nuevas tecnologías.

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Lo anterior, con el fin de detectar y evitar cualquier irregularidad en las cárceles de Colombia.

“Los delincuentes están utilizando tecnología del siglo 21 y nuestras cárceles se quedaron con la tecnología del siglo pasado”, señaló el delegado del ente de control, en derechos humanos.