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En horas de la noche de este martes, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aterrizó en Colombia y fue recibido por el canciller encargado, Luis Gilberto Murillo, debido a que el mandatario Gustavo Petro se encontraba en un Consejo de Seguridad en Ibagué. Lula se reunirá con su homólogo colombiano este miércoles cerca de las 10 a. m. en la Casa de Nariño.
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El jefe del Estado brasileño está acompañado por su canciller, Mauro Vieira y una delegación de alto nivel de su gobierno. Se espera que en el encuentro con Petro se aborden “agendas bilaterales de comercio e inversiones, desarrollo sostenible y cooperación amazónica, programas sociales, derechos humanos y agricultura familiar”. Las delegaciones también tratarán “la implementación de la Declaración de Belém do Pará de 2023, regulación farmacéutica, corredores bioceánicos, turismo, homologación de títulos universitarios e interconexión eléctrica”.
“Son dos países que cuentan con un importante contingente de afrodescendientes e indígenas, y tienen como prioridad, atribuida por sus gobernantes, el fortalecimiento de estos sectores en la sociedad”, dijo João Marcelo Galvão de Queiroz, director del Departamento de América del Sur del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.
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En esta visita también se espera la firma de “varios instrumentos de cooperación para impulsar alianzas estratégicas en materia de derechos humanos y desarrollo rural”, de acuerdo con la Cancillería colombiana. Por la parte de Brasil, Queiroz ha resaltado que los dos Estados “comparten visiones muy similares en lo que respecta a la dimensión amazónica que ambos poseen y en relación con la integración sudamericana y regional, de manera más amplia”.
La llegada de Lula a Colombia ocurre cuando se profundiza la fractura de las relaciones del mandatario colombiano con los de otros Estados. Entre ellos, Daniel Noboa, el presidente de Ecuador, a quien ha acusado de permitir una “barbarie” y cuestionado por allanar la embajada de México en Quito para capturar a Jorge Glas, exvicepresidente ecuatoriano investigado por corrupción. Otra de las más recientes fue con Javier Milei, el jefe del Estado argentino, quien lo llamó “terrorista” y causó que Petro llamara a consultas a Camilo Romero, el embajador de Colombia en Argentina. Días después, las relaciones se restablecieron.
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Esta es la segunda visita oficial de Lula como presidente de Brasil a Colombia: la primera ocurrió en julio de 2023, cuando estuvo en Leticia, Amazonas. Esta vez tiene previsto participar en la inauguración de la Feria del Libro de Bogotá (Filbo), a la que asistirá como invitado especial.
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