La emisora dio a conocer, este miércoles, que de acuerdo con el informe de Policía y Fiscalía las amenazas de muerte son en contra de excombatientes que se acogieron al proceso de paz, y que hoy están en la vida civil haciendo política o que trabajan en sus proyectos productivos.

La información oficial apunta, según la frecuencia, a que detrás de estos atentados a excombatientes están, por un lado, “las disidencias en cabeza de ‘Iván Márquez’, ‘El Paisa’ y ‘Romaña’”, mientras que, por el otro lado, se encuentran organizaciones criminales como el Eln, el ‘Clan del Golfo’, ‘los Pelusos’ y bandas criminales.

Caracol asegura que, para los investigadores, los recientes planes que se descubrieron para atentar contra Rodrigo Londoño ‘Timochenko’ y contra Pastor Alape “reforzaron la tesis de las autoridades, la cual señala que la orden es que todo el que haga apología al Acuerdo de Paz debe ser eliminado”.

Pero, ¿cuáles son las razones para que miembros de grupos armados quieran matar a quienes fueron sus antiguos compañeros de filas, y que se desmovilizaron? Pues Caracol dice que, según la investigación, una de las cabezas detrás de estos atentados es alias ‘Romaña’, y que su plan sería “callar a quienes tienen conocimiento de rutas del narcotráfico, de caletas con dinero y armamento”.

Para reforzar esta tesis, la emisora expone el caso del excombatiente de las Farc Alexánder Parra, asesinado en 2019 dentro de un espacio territorial (ETCR), y dice que el exjefe de finanzas de la columna ‘Teófilo Forero’ “tenía información privilegiada” sobre las actividades económicas ilegales que adelantaba este frente guerrillero, y que, además de eso, descubrió que otros desmovilizados usaban las camionetas asignadas por la Unidad Nacional de Protección para sus actividades clandestinas.

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Esta hipótesis es la misma que dio a conocer La Silla Vacía en un completo informe sobre excombatientes muertos, y la conclusión es la misma: que de 185 asesinados luego de la firma de la paz, según cuentas que hace la Farc, 79 eran exreclusos amnistiados o indultados, 16 tuvieron alguna posición de jerarquía y nueve más eran financiadores de la guerrilla. Es decir, cobraran extorsiones y manejaban el dinero de sus frentes.

La Silla mencionó el caso de Alfonso Ávila, alias ‘Chonchón’, financiero del frente 10 en Arauca, asesinado en agosto de 2017 en Puerto Jordán, y dice que según una fuente del partido Farc en ese departamento, “él sabía de propiedades, ganado y plata de las Farc, y por eso lo mandaron a matar”.

Pero el tener información privilegiada no sería la única razón para atentar contra los excombatientes, pues Caracol Radio menciona que también están asesinando a quienes promueven el proceso de paz en los espacios territoriales.

“Están haciendo pedagogía a favor del proceso de paz, lo que dificulta el plan de reclutamiento de las disidencias. Por eso, quienes protejan el proceso se volvieron objetivo militar de las disidencias”, dice la emisora, y advierte que pese a la seguridad los ETCR son vulnerables.