El papa León XIV hizo en las últimas horas el primer nombramiento para la Iglesia católica en Colombia. Se trata del presbítero Jorge Enrique Malpica Bejarano, quien ahora es obispo de la diócesis de Granada, departamento del Meta. El sacerdote habló en Noticias Caracol, aliado de Pulzo, sobre su nombramiento.
(Vea también: El Papa León XIV actualiza su documento de identidad peruano en el Vaticano)
El padre nació el 2 de agosto de 1967 en Gachetá, Cundinamarca, dentro de la Diócesis de Zipaquirá. Estudió Filosofía y Teología en el Seminario Mayor de San José de Zipaquirá y fue ordenado sacerdote para dicha diócesis el 18 de diciembre de 1993.
El nuevo obispo dijo que su nombramiento, “ante todo, es una gracia de Dios. Nunca uno pide estos momentos. Significa una bendición de Dios para todos”.
Según el obispo, “siempre estamos en las manos de Dios. Esta es una tarea y una misión que nos encomienda el señor Jesucristo. Entonces, lo primero es colocarnos en actitud de oración y que Dios haga su obra en nosotros que somos seres humanos. Desde que fui comunicado, esa ha sido mi actitud: orar por esta misión”.
Quién es el nuevo obispo de Granada
Sobre su recorrido en la Iglesia católica, el nuevo obispo dijo que “ya son 31 años de vida sacerdotal”. Entre lágrimas, mencionó que “en esta experiencia de servicio a la iglesia, han sido bastantes etapas de mi vida. Yo nací en Gachetá, Cundinamarca, estudié mi primaria, luego ingresé al seminario menor que funcionaba en Tocancipá, luego pasé al seminario mayor de Zipaquirá, donde estudié filosofía, teología y me ordené el 18 de diciembre de 1993”.
A lo largo de su sacerdocio, dijo, “he estado en las comunidades de Ubaté, luego estuve en Villa Pinzón, luego estuve en Villa Gómez, Cundinamarca, y luego, un buen tiempo, como formador en el seminario mayor de Zipaquirá. Durante este tiempo, también hice unos estudios de especialización en Roma y el resto del tiempo como formador”.
Para él, con su nombramiento tiene “un sentimiento de gratitud y también de temor, porque hay temores también para asumir esta misión”.
Su elección lo tomó “por sorpresa. Uno no espera una llamada del señor nuncio en Colombia. Uno sabe que el señor nuncio es el representante del papa en Colombia, pero uno nunca tiene el contacto de él ni tiene comunicación con él. Entonces, cuando recibe uno la llamada, uno realmente queda como sentado y de una manera inexplicable”.
El obispo se refirió al panorama actual que vive Colombia y la situación de violencia por la que atraviesan varias zonas del país. El obispo dijo que la Iglesia “siempre ha sido artífice de paz, de diálogo y de escucha. Entonces, como Iglesia, tenemos que buscar caminos que nos unan cada día más, como lo dijo el santo padre en su momento de elección. Crear puentes de comunión que no nos alejen, sino que nos acerque más como hijos de Dios. Que nos unamos cada día más como nación y país para buscar un nuevo horizonte y buscando siempre la unidad”.




Finalmente, el nuevo obispo de Granada, Meta, envió un mensaje para los jóvenes que buscan ser sacerdotes: “Que nos coloquemos en las manos de Dios. El señor nos llama para darlo todo por nuestra Iglesia, por las comunidades y por nuestras gentes. No debemos escatimar esfuerzos para poder acompañar espiritualmente a nuestras comunidades”.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO