El pasado 9 de febrero el Comité Nacional de Paro y el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de Colombia, CUT, anunciaron una nueva jornada de movilización; sería la primera de este año.

Esta marcha busca reflejar el descontento de las centrales obreras y los ciudadanos ante la difícil situación socioeconómica que atraviesa el país, pues como lo ha registrado esta redacción en varias ocasiones, la papa, la carne, el ‘corrientazo’, entre otros, han presentado grandes alzas en lo corrido de 2022.

¿Qué piensan los ciudadanos?

“Respeto los motivos de la marcha, pero por la situación que venimos pasando y lo cerca que estamos a las elecciones no sé qué tan conveniente sea movilizarse, ese espacio se podría hasta politizar”, fueron las palabras de Alejandra Díaz, comerciante de la ciudad.

Por otro lado, Luis Acuña, quien por el momento se encuentra desempleado ve la movilización como un dilema, “no se sabe si todas las personas realmente van a volver a salir, pues ya todos estamos cansados de las movilizaciones del año pasado, pero toca ser conscientes del alza de las cosas”.

Suministrada: para El Nuevo Día.
Suministrada: para El Nuevo Día.

Salir o no a las calles parece ser un tema que cada ciudadano está considerando, pues aunque las alzas en la canasta familiar y otros artículos han agudizado la pobreza en Ibagué, algunas personas no ven la movilización social como una alternativa que genere soluciones, más bien la analizan como una limitante y retroceso económico debido a las dificultades que se presentan en la movilidad, los actos vandálicos, entre otras situaciones que alteran el transcurrir habitual de la región: “Ese salario que era histórico para Colombia no sirvió para nada”.

Centrales obreras

Jhonatan Varón, integrante de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) Tolima, expresó que desde el Comité Departamental de Paro y las diferentes centrales obreras están decididos en volver a las calles.

“Se debe tener en cuenta que la situación del país y la región en términos de carestía es muy difícil, Ibagué hoy se ha convertido en la ciudad más cara del país y en ese sentido vemos con justa razón el llamado que nos hacen”, dijo Varón.

Entre tanto, como integrante del Partido Socialista de Trabajadores, Sergio Velásquez, comentó que aún no hay una definición respecto a la convocatoria, lo más probable es que participen como lo hicieron en el 2021.

“Hay muchos motivos para salir a las calles, por las causas, por los momentos difíciles del departamento, por la represión, por la muerte de los líderes y lideresas sociales, y para no darle tregua al gobierno, entonces sobran motivos para salir a las calles”, puntualizó Velásquez.

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La política

En las últimas movilizaciones especialmente las del ‘estallido social’ se evidenció el apoyo al igual que el rechazo de algunos políticos frente al paro, por lo tanto a pocos días de las elecciones nacionales esta redacción consultó a los entrevistados sobre las consecuencias que podría traer la movilización del 3 de marzo.

“La movilización social o la protesta social no tiene una dinámica politiquera ni electoral, es claro que el objetivo es solicitarle al Gobierno que tome medidas para que se reduzcan los precios de la canasta familiar”, comentó Jhonatan Varón.

Pero algo muy diferente piensa Sergio Velásquez, “el descontento social se puede expresar en cuanto a las elecciones, entonces yo creo que los sectores políticos del cambio son los que están canalizando ese descontento y esas serán las personas a las que las masas irán apoyar”.

En esta misma línea, Luis Acuña indicó que “la marcha se puede ver como una forma de medir poderes, ya que si sale mucha gente la izquierda demostraría que es favorita para las próximas elecciones, pero también toca estar atentos, porque si la movilización de un día se extiende por más tiempo podría afectar hasta la realización del proceso electoral”.