El secretario de Gobierno del Cauca, Jaime Asprilla, dijo a periodistas que las autoridades encontraron cuatro cadáveres en el caserío de Santa Helena, en el municipio de Corinto, y otro en Huasanó, en Caloto.
El funcionario afirmó que “no se sabe si se trata de indígenas” ya que por sus características físicas no parece que lo sean.
Según Asprilla, a las zonas donde hallaron los cuerpos este jueves ya llegaron miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía y otras autoridades para identificar a las víctimas.
Por su parte, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, atribuyó la nueva matanza a narcotraficantes que operan en el Cauca, donde hay extensos cultivos de coca y marihuana. Según él, los cuatro asesinados en Santa Helena estarían llevando a cabo “labores de topografía”.
Ante esta situación el comandante de las Fuerzas Militares, general Luis Fernando Navarro, y el del Ejército, general Nicacio Martínez, así como el ministro Botero, viajarán al Cauca por orden del presidente Iván Duque.
De otro lado, el coordinador del área de Derechos Humanos de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN), Eduin Mauricio Capaz, afirmó en Twitter que después de asesinar a las cuatro personas en Santa Elena los victimarios huyeron en un vehículo hacia una zona montañosa.
Capaz confirmó que las víctimas de este jueves “no son indígenas”, mientras que el noticiero CM& informó que por lo menos 4 de las personas masacradas habrían muerto por degollamiento y que sus cadáveres fueron lanzados desde un vehículo.
Las razones, según gente de la zona, estaría relacionada con cultivos ilícitos de coca y marihuana.
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