Con el paso de los días, el panorama en los municipios se sigue agudizando a causa del invierno, el sector agrícola, los transportadores, los estudiantes y los viajeros, empezaron a vivir un ‘vía crucis’ por adelantado.
Según reporte del Ideam, en el Tolima tendrán más afectaciones poblaciones como Alpujarra, Carmen de Apicalá, Coello, Dolores, Suárez, Valle de San Juan, Villarrica, Natagaima y Piedras.
La situación no ‘pinta’ fácil para los tolimenses, según la directora de Gestión del Riesgo del Departamento, Andrea Mayorquín, este año se unió la segunda temporada de más lluvias de 2021 con la primera de este 2022, “básicamente hemos tenido invierno durante dos años, (ya que) que inició en 2020 y no ha parado”.
Esta situación se ve como una alteración climática, pues lo esperado era un trimestre de temporada seca con menos lluvias, “hace un año teníamos incendios forestales, esta vez al comienzo (de año) tuvimos en Coello, Suárez y Prado, pero ahora tenemos reporte de precipitaciones”.
La funcionaria agregó que en lo corrido de esta vigencia, 14 Administraciones municipales recurrieron a la calamidad pública por lluvias, “la mayor parte que se ha visto afectada es el norte del Tolima, también en el sur nos han reportado afectaciones en viviendas y familias, pero sobretodo se ha visto afectada la malla vial de la región”.
En medio de la emergencia el Gobierno departamental ha entregado apoyo a través de ayudas humanitarias y el traslado de maquinaria.
Desde Santa Isabel lanzan un llamado al Gobierno seccional
En el caso de Santa Isabel, el mandatario Rodolfo López Sierra, a través de sus redes sociales, hizo un llamado a la Gobernación del Tolima para que le ayude a atender la crítica situación de las vías secundarias que están dentro de esta jurisdicción.
Por lo que explicó que entre la carretera Nacional y el casco urbano hay 36 kilómetros, en los cuales hasta el martes habían dos derrumbes “que amenazan con dejarnos sin vía, pero tiene más de seis puntos en estado crítico, si siguen las lluvias van a colapsar y vamos a quedar incomunicados”.
En cuanto al corredor Santa Isabel – corregimiento El Bosque (Murillo) está “intransitable, el jueves tuvimos un represamiento de vehículos y cerca de 20 personas tuvieron que pasar la noche en la carretera, debido al mal estado”.
Hacia la dirección a Anzoátegui, entre las veredas La Rica y San Carlos, la conexión está en pésimas condiciones de acuerdo a lo expresado por López Sierra, hay “un derrumbe en el kilómetro 4, que en cualquier momento puede colapsar la vía”, en las mismas condiciones estaría la que lleva a Santa Teresa.
5 mil agricultores afectados en Fresno
En el marco de este panorama, el mandatario de Fresno, Jorge Alexander Mejía, dijo que tenía afectaciones en siete vías rurales y el mismo número de veredas incomunicadas, “tenemos cerca de cinco mil familias que no pueden salir al área urbana con sus productos agropecuarios, hay que recordar que Fresno tiene una dinámica diaria de producción, los campesinos están muy afectados”.
Entre el tipo de alimentos que quedan represados por falta de movilidad están el aguacate, los plátanos y la guanábana. Algunos se las ingenian para lograr trasladar parte de la producción, pero el riesgo les genera pérdida en las ganancias, porque los alimentos llegan maltratados debido al mal estado de los corredores viales.
Otra de las preocupaciones es que “la florescencia de la guanábana y del aguacate se está perdiendo, creo que el campo en unos meses va a tener una crisis económica muy complicada”, expresó Mejía.
En cuanto a las comunidades más perjudicadas se cuentan las de El Raizal I y II, La Divisa Guayacanal, Hondura, Trincheras y el corregimiento El Tablazo. Ante el preocupante panorama el municipio declaró una emergencia vial.
Transportadores quedaron de brazos cruzados
Y por los lados de Villahermosa la situación no mejora, según habitantes de la vereda Alto Bonito la falta de vías generó un golpe a los transportadores, comerciantes y estudiantes, en diálogo con un conductor de un vehículo conocido tradicionalmente como ‘escalera,’ comentó que la vía hacia Casabianca tiene problemas considerables.
“Tengo el carro parado, por acá estoy como se dice ‘cogiendo café’ porque no hay cómo trabajar”, expresó el hombre. Agregó, que se consigue el sustento transportando diferentes productos como el café, pero hoy literalmente está de brazos cruzados.
Y como si fuera poco tener vías bloqueadas, en el caso de Alto Bonito la comunidad se quedó sin agua y próximamente se les suspenderá el servicio de energía eléctrica, pues el transformador está en riesgo de tener un corto.
‘Un invierno que no se esperaba’: Alcalde de Venadillo
Por el lado de Venadillo, el mandatario Jorge Cabrera calificó la atípica temporada como “muy difícil, es un invierno que no esperábamos porque recordemos que (generalmente) es en abril, pero se nos adelantó y ha caído mucho agua, tenemos más de 25 derrumbes a nivel de vías terciarias”.
El hecho provoca un efecto dominó, por lo que también se cuenta taponamiento en más de seis vías principales en la zona de cordillera, “tenemos veredas totalmente bloqueadas, es difícil el tránsito, no han podido sacar los alimentos. Los jóvenes y niños en las instituciones educativas están sufriendo para ir a estudiar, exponen sus vidas”, dijo Cabrera.
A raíz de la crisis, junto al Consejo Municipal de Gestión del Riesgo, la Alcaldía decretó la Calamidad Pública de esta forma, según explicó el mandatario, se podrá contratar de manera rápida dos equipos de maquinaria para empezar a dar una solución a la marcada problemática, además el Gobierno departamental acordó enviar una retroexcavadora y una volqueta, para trabajar en la vía que conduce hacia Santa Isabel.
En cuanto al cronograma de trabajo vial, se tiene previsto llegar a los corregimientos Malabar y Junín, de la misma forma, a las veredas La Argentina, El Salto y Buena Vista.
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