El gobierno del expresidente Iván Duque rompió en 2019 las negociaciones de paz con el Eln, luego del ataque con un carro bomba a la escuela de policía General Santander, donde murieron 22 personas. Sin embargo, desde que llegó al poder, Gustavo Petro ha manifestado su plena disposición de reanudar estas conversaciones, como parte de su idea de lograr la “paz total” en Colombia.

Para avanzar en el proceso, el jefe de Estado ordenó hace un par de días suspender las órdenes de captura y extradición contra los negociadores de la guerrilla, los cuales se encuentran en Cuba. Algunas horas después de ese anuncio, se conocieron cuáles serían los integrantes del grupo armado que se sentarían en la mesa de negociaciones con el Gobierno Nacional.

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Sin embargo, estas disposiciones no fueron del agrado de varios sectores políticos. Por ejemplo, el senador Miguel Uribe Turbay, uno de los más votados en las pasadas elecciones legislativas, hizo saber sus reparos en una entrevista con El Colombiano.  

Miguel Uribe comparó negociaciones de paz con Pablo Escobar

En uno de los tramos del diálogo, al congresista se le preguntó por la suspensión de las órdenes de captura contra los negociadores del Eln, ante lo cual respondió que era “el camino hacia la impunidad total”. Además, remarcó que el presidente no debe “convertir el proceso de paz en un interés político“.

“El gobierno quiere saltar a un escenario de diálogo político con criminales y narcotraficantes y darles beneficios a quienes hoy no tienen condición de organizaciones políticas”, dijo Uribe.

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Por último, el legislador cree que la propuesta de diálogos del Gobierno con grupos al margen de la ley es “tan aberrante como si se hubiera negociado con Pablo Escobar”.

Las conversaciones con los grupos armados no han iniciado formalmente y, de hecho, muchos de estos no se han pronunciado al respecto. Por lo tanto, el ministro del Interior, Alfonso Prada, dijo que están a la espera de “un guiño” para establecer las “condiciones inmediatas” de los acuerdos.