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En Colombia se empezó a aplicar la Ley 2292 de 2023 para cambiar la condena carcelaria por el servicio social gratuito. Una mujer en Ibagué, Tolima, fue la primera beneficiada.
La normativa fue diseñada para las madres reclusas y busca otorgarles la libertad, a cambio de trabajo comunitario no remunerado. Quienes quieran acogerse a la norma tienen que ser madres cabeza de familia y deben estar condenadas por delitos menores con penas inferiores a 8 años.
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Esto quiere decir que personas condenadas por delitos graves como homicidio, violencia intrafamiliar o instrumentalización a menores no podrán beneficiarse de la ley.
El primer caso es el de una mujer que pagaba una condena de 39 meses de prisión por el delito de hurto. El Juzgado Tercero de Ejecución de Penas de Ibagué, Tolima, emitió un fallo histórico al otorgarle la libertad condicional amparada en esta ley.
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La mujer había sido sentenciada el 15 de marzo de 2023 por hechos cometidos en octubre de 2021. Según el Ministerio de Justicia, el juzgado también valoró “la conducta y comportamiento de la privada de la libertad”.
Además, es madre de 3 menores de 1, 3 y 7 años, que estaban en casas de familiares porque su padre también está privado de la libertad por violencia intrafamiliar. Es por eso que ahora podrá estar bajo el cuidado de sus hijos, pero además, deberá de pagar sin remuneración 1170 días de servicio comunitario, un poco más de 3 años.
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Cada caso deberá ser revisado de manera particular para verificar si la reclusa cumple con los requisitos necesarios para concederle la libertad.
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