El caso adquirió notoriedad desde mediados de enero, cuando el hombre, conocido como Juan Pablo Medina, comenzó un plantón frente al centro médico y anunció que interpondría una tutela para buscar que no se interrumpiera el embarazo que en ese entonces era de 7 meses.

Además, el hombre pedía que se le entregara al que iba a ser su hijo pues el caso no cumplía ninguna de las causales establecidas por la Corte Constitucional para validar la interrupción voluntaria del embarazo.

Sin embargo, este domingo la senadora del Centro Democrático María del Rosario Guerra anunció que ya se había llevado a cabo el procedimiento, acusando a Profamilia de ser “promotor del aborto indiscriminado” y de haber “montado un negocio” alrededor de la que llamó una “práctica escabrosa”:

Mujer embarazada

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A raíz de esto, La W informó que Medina “acudirá a la justicia para denunciar el caso por el delito de homicidio, teniendo en cuenta que de manera insistente había solicitado que el embarazo no fuera interrumpido y que el bebé le fuese entregado”.

Además, la representante Margarita Restrepo también apoyó esa tesis: “Aquello debe ser considerado como un homicidio toda vez que, dada la maduración del feto, estamos frente a un ser que tenía elevadísimas posibilidades de supervivencia”, indicó la congresista, según Radio Santa Fe.

“Solicito de manera urgente la intervención de las autoridades, particularmente de la Fiscalía General de la Nación, para efectos de que inicie las indagaciones correspondientes respecto del homicidio del pequeño Juan Sebastián”: Margarita Restrepo

De momento no ha trascendido si la clínica llevó a cabo el procedimiento teniendo en cuenta alguna circunstancia adicional como las contempladas por la ley para estos casos y tampoco se conoce la versión de la mujer. Lo único que se sabe al respecto es también una versión del propio Medina. Según RCN Radio, en diciembre dejó de ver a la mujer con la que llevaba poco más de un año de relación, pero en enero la familia de ella le habló de malformaciones en el feto y le dijo que le iban a practicar el aborto en una clínica de Cali.

El hombre desmintió esa versión diciendo que en realidad es “en una clínica de Popayán donde había ingresado voluntariamente a que le practicaran la interrupción del embarazo”, agrega la emisora. Además, él asegura que ambos querían tener al bebé y que una EPS de Popayán ya había establecido que no había malformaciones.

Mientras que en días pasados las redes sociales apoyaban al que iba a ser el padre del bebé abortado con hashtags como #NoAlAbortoDeJuanSe y #SalvemosaJuanSe, este lunes el clamor se convirtió en un reclamo airado contra Profamilia, con el numeral #ProfamiliaAsesinos.

El tema del aborto se encuentra de nuevo en plena discusión en Colombia a raíz del pedido que hizo una abogada para que la Corte Constitucional le otorgara medidas cautelares que suspendieran esta práctica en los casos permitidos.

Sin embargo, el magistrado Alejandro Linares, encargado de abordar el tema, optó en cambio por redactar una ponencia en sentido contrario, buscando la despenalización casi total durante los primeros 3 meses de embarazo.