La determinación fue tomada por la Corte Suprema de Justicia, que revocó una sentencia del Tribunal Superior de Cundinamarca que ya había declarado inocente al fiscal Jorge Daniel Ruíz por el delito de concusión, señaló El Espectador.
En los hechos, el funcionario le propuso a Álvaro Moreno Vargas, procesado por violencia intrafamiliar, que trabajara gratis en el arreglo de su casa, agrega el rotativo.
Ante los hechos, Ruiz fue condenado a 8 años y 10 meses de prisión. Además, deberá pagar una multa superior a los 75 millones de pesos.
En la determinación de la Corte, citada por el diario, “se estableció que, en verdad, Jorge Daniel Ruiz indujo a Álvaro Moreno Vargas a realizar gratis tal actividad, a cambio de no meterlo a la cárcel y, asimismo, archivarle la carpeta, razón por la cual lo forzó a firmar los documentos con la finalidad de legalizar la situación irregular”.
¿Cómo ocurrió el caso?
En mayo de 2014, el fiscal Ruiz había aceptado un acuerdo judicial pedido por el constructor Álvaro Moreno Vargas, quien iba a enfrentar un juicio por violencia intrafamiliar. En ese momento, el señalado agresor se comprometió a tener un buen comportamiento a cambio de no ser condenado por un caso de agresión contra su pareja, cuenta el medio.
De acuerdo con la versión citada por el periódico, un mes después, la esposa del fiscal suscribió un contrato fraudulento con Vargas. Así pues, él se encargaría de arreglar una casa de la urbanización Villa Sion, en el municipio de Facatativá.
Dicho contrato era por un valor 1′575.000 pesos entre el fiscal Ruiz, su esposa Martha Martínez y el constructor Moreno Vargas. No obstante, su finalidad era que el procesado arreglara una casa que estaba en obra gris para evitar la acción penal.
Ante los hechos, la Fiscalía había imputado a Ruiz, el 24 de febrero de 2017, por el delito de concusión, pues se había aprovechado de su posición para inducir a alguien a dar, de forma ilegal, “dinero o cualquier otra utilidad”, agregó El Espectador.
El 16 de octubre de 2019, el Tribunal de Distrito de Cundinamarca absolvió a Ruiz del delito de concusión, después de que la defensa interpusiera un recurso de reposición. Sin embargo, cuenta el periódico, la Fiscalía se remitió a la Corte Suprema, donde aseguró que las pruebas contra el funcionario eran suficientes para demostrar que había cometido un crimen.
Finalmente, la Corte dijo que Ruíz —siendo fiscal de Fusagasugá— “indujo a Álvaro Moreno Vargas para que le suministrara una utilidad indebida” y determinó que había ejercido un poder intimidatorio sobre el constructor, razón por la que fue condenado.
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