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Los habitantes de El Guamo, en Bolívar, padecieron el miércoles una sofocante temperatura de 38.2 grados centígrados. Si bien se trata de una cifra que aún está lejos del récord registrado en Colombia –que justamente conserva este municipio, que en mayo de 2023 llegó hasta los 41 grados centígrados–, se trata de un indicador que sigue demostrando las angustiosas consecuencias del fenómeno de El Niño en el país. El panorama es alarmante.
De 1.102 poblaciones en Colombia, hay 637 (el 58 %) en alerta por eventuales incendios forestales causados por las altas temperaturas. Es decir, casi tres de cada cinco municipios de todo el país enfrentan algún tipo de alerta, bien sea roja, naranja o amarilla. Después de Boyacá –que tiene 102 poblaciones en alerta–, Antioquia es la región más afectada por la ola de calor: 90 de sus 125 municipios tienen algún tipo de alerta. Ello indica que el 72 % del departamento está en riesgo (ver Infografía al final).
(Vea también: Ideam dio su pronóstico sobre cuándo termina el fenómeno de El Niño; podría alargarse)
Santander, con 60 poblaciones, es la región con mayor número de municipios en alerta roja. Solo allí hay 33 municipios con racionamiento de agua y 13 con probabilidad de desabastecimiento de agua e inseguridad alimentaria. En la misma línea, recién este miércoles la Alcaldía de Santa Marta se vio obligada a declarar calamidad pública ante los efectos cada vez más sofocantes del calor.
Las alarmas permanecen encendidas si se tiene en cuenta que, según los cálculos del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), El Niño podría extenderse hasta abril próximo, lo que daría pie a más incendios forestales y olas de sequía que, incluso, podrían llegar a poner en jaque centrales de energía.
“En enero el fenómeno alcanzó la categoría fuerte porque el calentamiento en las aguas superficiales superó el umbral de 1.5 grados Celsius. Con base en los reportes de centros internacionales, que han actualizado la posible extensión del fenómeno, se podrá alcanzar una condición neutral entre abril y junio. Es decir, el Niño se extendería hasta el primer cuatrimestre de 2024”, explicó a EL COLOMBIANO Julieta Serna, coordinadora del Grupo de Climatología y Agrometeorología del Ideam.
El Niño se intensificó
Si bien desde mayo de 2023 el Gobierno advertía por la ocurrencia de El Niño, solo hasta noviembre lo declaró oficialmente, teniendo en cuenta que se cumplió el “quinto trimestre seguido, en donde las anomalías del océano Pacífico en temperatura están por encima de los 0.5º”. Con todo, solo hasta enero el fenómeno se intensificó y prendió las alertas. ¿Hubo un error de cálculo?
De acuerdo con Maria del Pilar García Pachón, experta en derecho del medio ambiente e investigadora de la Universidad Externado, más allá de que el Ideam u otros organismos hayan fallado en sus predicciones, lo cierto es que El Niño se intensificó. “Los cambios de temperatura se deben a diversos factores que interactúan de manera compleja, las variaciones en cualquiera de ellos pueden tener impactos significativos en el clima y la temperatura del planeta a lo largo del tiempo; es decir, la temperatura no depende exclusivamente del fenómeno de El Niño”.
(Lea también: Angustia en cerros de Bogotá por fuerte incendio; nube de humo llegó a 3 localidades)
En ello coincidió Diana Cristina Díaz, magíster en meteorología y doctora en geociencias, quien alertó que las probabilidades de que El Niño se fortaleciera “eran muy altas y efectivamente así sucedió”. Sin embargo, aseguró que no se trató de una anomalía, “teniendo en cuenta que usualmente tiende a intensificarse entre diciembre, enero y febrero”.
En esa línea, la también profesora de la Universidad Jorge Tadeo Lozano instó a que haya un monitoreo permanente de la situación y que se identifiquen puntos de calor para evitar qué sitios presentan una temperatura más elevado de lo habitual. Además, advirtió que “no necesariamente estas condiciones de calor serán homogéneas para todo el territorio nacional, pues hay zonas como el Pacífico en donde podría haber precipitaciones típicas que se combinan con un escenario de suelos con menor humedad por las mayores temperaturas”. Un ejemplo de ello fue lo ocurrido a finales de la semana pasada en el Chocó, donde un alud de tierra causó la muerte de 39 personas.
Plan de choque del Gobierno Nacional
Ante los impactos del fenómeno de El Niño, la semana pasada el presidente Gustavo Petro advirtió que 2024 “puede ser el año más caliente en la historia de la humanidad en todo el mundo”. En esa línea, instó a las autoridades nacionales a priorizar el agua.
Estamos en alerta roja por incendios forestales en el territorio nacional.
Es el fenómeno del niño agravado por el calentamiento global. Puede ser el año más caliente en la historia de la humanidad en todo el mundo.
Todo alcalde, gobernador y el gobierno nacional tiene como… pic.twitter.com/pDlisvKG5Q
— Gustavo Petro (@petrogustavo) January 10, 2024
Por ello, su Gobierno, además de instalar una sala de crisis para monitorear la situación a nivel nacional, convocó a los gobernadores “para que instalen puestos de mando unificado de cara a hacerle seguimiento a cómo se devuelve este fenómeno y sus impactos”, según la ministra de Ambiente, Susana Muhamad.
Pulzo complementa
Hace unas semanas, un intenso incendio se desató en el municipio de Copacabana, al norte del Valle de Aburrá, cerca del túnel de la autopista Medellín-Bogotá. Videos compartidos en redes sociales muestran la magnitud del incidente, con bomberos de Copacabana trabajando para controlar las llamas. El fuego se ha originado en el camino hacia un área conocida como el Morrón, frecuentada por deportistas.
Aunque aún no hay un pronunciamiento oficial de las autoridades ni de la Alcaldía de Copacabana, el concesionario vial Devimed informó de paso restringido en la vía Medellín-El Santuario debido a un incidente vial. La situación mantiene en alerta a los habitantes del municipio, quienes han presenciado el incendio desde distintos puntos. Se destaca que este no es el primer incidente de este tipo en la zona, generando preocupación en la comunidad.
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