El pasado 10 de junio, el presidente Gustavo Petro se pegó el viaje hasta Cuba y anunció con bombos y platillos el cese al fuego bilateral con el Eln durante un periodo de seis meses. El mandatario, después de varios intentos frustrados, logró estampar su firma en el acuerdo junto con alias ‘Antonio García’, comandante de esa guerrilla y los países garantes.
(Vea también: En medio de escándalos y crisis de Gobierno, Petro despegó (poquito) en su imagen)
Ese nuevo paso importante en los diálogos de paz con el Eln supondría una mejora en las relaciones entre ambas partes, que históricamente han sido complejas por la ideología que maneja esa guerrilla, la cual es muy distinta en principios a organizaciones criminales como las disidencias de las Farc.
Eln ahora cuestiona los escándalos del Gobierno Nacional
Por esa razón, el país esperaba una moderación de las expresiones para ir aclimatando la paz entre el Eln y el Gobierno; sin embargo, eso no se ha dado, pues la última revista Voces que publicó esa guerrilla tiene un artículo en el que critica al presidente Gustavo Petro y la relación con el exembajador Armando Benedetti, quien destapó un escándalo al decir que la campaña del mandatario se financió con dineros de dudosa procedencia.
En dicha publicación, el Eln cuestiona los manejos que ha tenido el jefe de Estado desde que comenzó su mandato: “Resulta extraño y quizás cínico que para neutralizar los ataques de Armando Benedetti, desde diferentes sectores del Gobierno se le descalifique [al presidente]. ¿Si era tan malo por qué lo vincularon? Los principales contradictores no están en la extrema derecha ni en la derecha, están en el mismo Gobierno, cuando con sus actos coloca en entredicho sus promesas de campaña y compromisos con el cambio”.
El Eln, sin proponérselo, les da la razón a los periodistas, que, ante las críticas de Petro a los medios, le recuerdan que los escándalos que han estallado en el Gobierno y que lo tienen contra las cuerdas se han originado en su propio entorno y entre sus más cercanos colaboradores.
Finalmente, esa guerrilla cerró su publicación criticando fuertemente al presidente Gustavo Petro y haciéndole una petición, después de escuchar lo que él dijo en la última marcha convocada para apoyar sus reformas.
“De nada sirve hablar de cambio si este es eminentemente retórico, qué sentido tiene hablar de acabar con el modelo politiquero tradicional, si a favor del cambio recurren a prácticas espurias. ¿Es posible construir el cambio actuando con los métodos antiéticos y corruptos de los rancios políticos?, el cambio se construye con honradez y enseñando con el ejemplo. Señor presidente, no basta con recurrir al populismo y sacar miles de colombianos a las calles, lo que necesitamos es una política de Estado que traiga paz con justicia social, que busque el beneficio de todos”, dice el texto.
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Esta nueva postura abre el manto de duda sobre lo que hablan los negociadores de esa guerrilla en la mesa con el Gobierno y lo que realmente piensan y sienten otras estructuras, lo cual también reafirma la idea de que no hay unidad de mando y hace temer porque no todos los integrantes del Eln se acojan lo que decidan sus jefes, al ser una organización federalizada.
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