El mandatario ordenó al ministro de Salud, Fernando Ruiz, emitir un decreto “extendiendo hasta el 30 de noviembre el aislamiento selectivo con distanciameinto individual responsable, manteniendo la vigencia de las medidas actuales” a partir del 1 de noviembre.

Esto implica que, por lo menos mientras se mantenga el curso actual de la pandemia, no se implementarán medidas restrictivas más estrictas como las que Europa se está viendo obligada a volver a imponer por los rebrotes de COVID-19.

De hecho Duque comenzó su programa manifestando su solidaridad con esos países, como Francia, España y Reino Unido, agregando que para Colombia y otros países de la región “sería muy doloroso enfrentar una situación como la que vive Europa“.

“La pregunta es, ¿se puede prevenir? La respuesta es sí”, prosiguió el mandatario, subrayando que esto “depende de todos nosotros” y pidió mantener la “disciplina y cultura ciudadana, seguir protocolos de seguridad, no bajar la guardia frente al uso del tapabocas, mantener el distanciamiento y evitar las aglomeraciones”.

Aunque el mandatario señaló que “hay razones para ser optimistas”, tras pasar un septiembre con una tendencia a la baja en las cifras, reconoció que en octubre se han evidenciado retrocesos leves, principalmente en “regiones que no habían tenido picos” y ahora los están teniendo.

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Según él, los tumultos son las principales causas de rebrotes, por lo que pidió que autoridades locales trabajen de la mano con el Gobierno Nacional para “ejercer mayor control sobre las aglomeraciones”.

“Hago un llamado a que sea la conciencia, el comportamiento, la disciplina y la cultura ciudadana las que imperen para que podamos transitar un buen mes de noviembre y protejamos la temporada de Navidad en nuestro país. Tenemos que evitar rebrotes y depende de nosotros”, concluyó.

¿Qué implica el aislamiento selectivo que irá hasta el 30 de noviembre?

Al momento de abandonar las cuarentenas y el distanciamiento estricto, el ministro Ruiz, explicó que la nueva etapa implicaría que no se aíslan personas por condiciones de riesgo, sino por ser sospechosas o con contactos de tener COVID-19.

Además, durante esta etapa se adelanta “un rastreo y aislamiento de aquellos que tengan síntomas respiratorios, pero permitiendo una mayor movilidad de personas que estén libres de afectación”, mientras se mantienen “prohibiciones estrictas” a eventos públicos y privados que representen aglomeraciones como en discotecas, conciertos, ferias y eventos deportivos.

La idea de esta etapa es permitir mayor movilidad de personas y reabrir el comercio gradualmente en zonas de media y alta afectación, pero que en caso de un rebrote habrá que tomar “medidas más estrictas”, señaló el Gobierno en su momento.