Según un informe de inteligencia militar del Ejército, citado por Blu Radio, el grupo que quedó del frente décimo de la banda criminal, y algunos cabecillas que están en Venezuela, estarían ordenando quemar los buses porque las empresas no les dan entre 800 y los 1.000 millones de pesos, suma que les estarían exigiendo.

De acuerdo con información de las autoridades, mencionada por la emisora, las disidencias de las Farc estarían contratando a la delincuencia común para que ejecuten estos actos vandálicos, y les pagarían entre 3 y 5 millones de pesos a los que quemen buses en parqueaderos y en “zonas no tan concurridas”; y hasta 10 millones de pesos a quienes lo hagan en vías principales.

“Los están contratando disidencias de Farc desde Arauca y desde Venezuela. El modus operandi es dejar un panfleto escrito a mano (…). Este grupo residual tiene foco en Arauca, pero los principales cabecillas están en Venezuela”, dijo a la emisora el general Marcos Pinto, comandante de la Brigada Trece del Ejército.

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El más reciente de estos casos se presentó en la noche de este miércoles, cuando delincuentes incineraron un bus de la empresa Autofusa que pasaba por el Alto de las Rosas, en la vía Bogotá-Fusagasugá.

Por esos hechos, tres personas, dos venezolanos y un colombiano, fueron capturados, y se suman a las otras siete detenciones que, según Blu Radio, las autoridades han hecho por casos similares.

Blu Radio dice que estos grupos ilegales tendrían interés en controlar la vía Sumapaz, para el transporte del narcotráfico.