Deyanira Gómez concedió una entrevista en Blu Radio, este lunes, y contó que el pasado 2 de mayo cuando llegó a su oficina en Coomeva Medicina Prepagada se encontró con una carta en la que le anunciaban la terminación de su contrato.
“Me llama mi jefe, con el jefe de recursos humanos, y me dice que pidieron cancelación de mi contrato de forma unilateral, ya que posiblemente hay algo de reestructuración”, explicó Gómez en la emisora, y dijo que en ese momento su jefe le aseguró que no tenía “quejas” de su comportamiento o desempeño laboral.
Gómez trabajaba como auditora médica desde hace 6 años, y dijo que se vio sorprendida cuando después de salir de su trabajo se encontró, casi un mes después, con que la compañía estaba buscando a un nuevo auditor para que ocupara su cargo.
Ante la denuncia de la mujer, el periodista Daniel Coronell publicó en Semana la carta de despido en cuyo asunto se hace referencia a la “terminación unilateral del contrato de trabajo sin justa causa”, y está firmada por el gerente regional centro oriente de Coomeva.
Pero la W Radio informó este lunes que cuando se comunicó con Coomeva para conocer más detalles al respecto no encontró respuesta, y citó un comunicado de la compañía del 14 de junio en el que da una explicación diferente al asunto de la carta.
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Que “la decisión de finalizar la relación laboral con la doctora Gómez Sarmiento se tomó teniendo en cuenta aspectos de relacionamiento que no aportaban a un mejor ambiente laboral con sus compañeros. Y, a su vez, índices de desempeño poco sobresalientes que llevaron a la finalización del contrato de manera unilateral”, dice el documento, según lo presentó la periodista Vicky Dávila en su programa.
Si bien Coronell aclara que no hay pruebas de que el despido de la mujer sea consecuencia del caso de Monsalve, sí reveló que en conversaciones interceptadas el hoy senador Uribe se muestra interesado en saber dónde trabaja Gómez.
Estas dos versiones de la empresa sembraron dudas que quedaron en el aire. Por eso, Deyanira Gómez cree que su despido hizo parte de una aparente presión que, sumada a intimidaciones que sus escoltas denunciaron, la motivaron a salir del país junto con sus hijos mientras se aclara la situación jurídica de su esposo, el expraramilitar Juan Guillermo Monsalve, que se encuentra preso y es uno de los testigos en contra del expresidente Uribe.
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