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El pasado 8 de noviembre, los habitantes del sector de Santa Rita Oriental, en la localidad de San Cristóbal, vivieron una trágica noche a causa de un taxista que, conduciendo a exceso de velocidad y con grado tres de alcoholemia, el más alto, atropelló a once personas contra la fachada de una vivienda ubicada en la calle 47 sur con carrera 6 este.
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Cabe resaltar que cuatro de las víctimas eran menores de edad, hermanos de una misma familia. Lamentablemente, Karol Stefania Arturo Torres, de tan solo 15 años, falleció en el Hospital Santa Clara a las 4:30 de la madrugada del 11 de noviembre. Su hermano, Juan Martín, de siete años, continúa luchando por su vida, pero con un pronóstico reservado.
El taxista implicado, José Eduardo Chala Franco, fue capturado en el lugar de los hechos pocos minutos después del siniestro y puesto a disposición de las autoridades. Chala Franco aceptó los cargos de homicidio agravado en grado de tentativa y lesiones personales dolosas.
Sin embargo, con el fallecimiento de Karol, estos cargos podrían agravarse, llegando incluso a imputársele homicidio a título de dolo eventual agravado en accidente de tránsito, por lo cual podría enfrentar una condena de entre 17 y 37 años de prisión, según explicó el abogado penalista Ricardo Burgos.
Qué se sabe del taxista que atropelló a 11 personas en Bogotá
En conversación con un vecino del sector de manera anónima, que conocía a José Eduardo, este reveló detalles del taxista. Según él, Chala Franco era “un hombre decente, como cualquier otro”, aunque solía tomarse sus ‘polas’ y frecuentaba un establecimiento, presuntamente cerca del lugar de los hechos.
“Sí, es una tienda, antes de llegar a la barbería”, relató, refiriéndose al sitio donde terminó el taxi de placas VDW 626 que conducía Chala. “Por ahí era donde tomaba el hombre”. Según su testimonio, lo vio tomar allí en varias ocasiones
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