El país atraviesa una situación complicada en el sector de la construcción y la adquisición de vivienda, que ha causado el terror de empresarios y muchas personas en general, pues consideran que estas reducciones ilustran un grave panorama para 2024.
(Vea también: anuncian desde cuándo saldría más barato comprar casa o carro en Colombia).
Y es que la preocupación no es de gratis, pues las ventas en la vivienda de interés social en Colombia acumulan caídas por más de un año y medio. Tan solo para este mes de febrero, se registró una disminución en las ventas del 20,6 por ciento con respecto al mes anterior.
Pero este no es el dato más angustiante. Como efecto de esta disminución en la demanda, la oferta también ha registrado fuertes bajones que representan, según cifras de Camacol, una disminución en el número de iniciaciones de vivienda del 49,7 por ciento con respecto al mismo mes (febrero) de 2023.
El problema es que la baja de estas iniciaciones, que como su nombre lo indica, hacen referencia a aquellos inicios de proyectos de construcción, pueden incidir sobre el número de empleos en el país.
De esta manera, cuando las iniciaciones incrementan se requiere de mayor mano de obra, lo que aumenta la demanda de empleos. Por otra parte, cuando bajan estas cifras, el efecto se vuelve negativo sobre el número de trabajos.
Según Camacol, una adecuada inversión pública sobre el sector podría ayudar en la solución de este problema, pues, tal como explicó el gremio:
“con una inversión pública adicional de $1 billón se movilizarían cerca de $40 billones en ventas que impulsarían más de 270 mil empleos por año durante cuatro años”.
El escenario, por lo anterior, preocupa a los líderes del sector, quienes también esperan bajas en la tasa de interés, que fija el Banco de la República, para fomentar la compra de estos bienes, además de una ayuda económica del Gobierno para hacer que las personas vuelvan a soñar con tener su casa propia.
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