En Bogotá este fin de semana a los ciudadanos les tocó guardar la ropa ligera y volver a sacar la sombrilla, pues desde el viernes comenzaron las lluvias en la ciudad. El sábado fue quizás el aguacero más intenso y armó un caos en la capital, pues incluso causó inundaciones en el centro comercial Unicentro.
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También, en vías como la carrera Séptima o la avenida novena, en la localidad de Usaquén; sin embargo, la situación de los embalses sigue siendo crítica. Tal y como lo dijo el alcalde Carlos Fernando Galán, quien aguó las esperanzas por el nivel y pide no bajar la guardia.
De acuerdo con datos del Acueducto, en Bogotá no se ha logrado la meta de ahorrar 15 metros cúbicos por segundo y lo más cerca que se ha llegado es al 15,34 por día.
“La situación aún es crítica”, agregó Galán sobre la cruda situación en el embalse San Rafael, desde donde grabó un video mostrando que todavía hay un importante terreno del embalse que está seco y que las lluvias no han logrado amenguar la situación.
El norte de la ciudad fue el más afectado, principalmente los barrios Santa Bárbara y Chicó Norte, entre la carrera 13 y las calles 119 y 122, así como la carrera 11 entre calles 97 y 98, respectivamente. Las principales afectaciones se presentaron en el centro comercial Unicentro y en los parqueaderos de las edificaciones, donde se empozaron aguas lluvias, allí se instalaron las motobombas necesarias y se atendió con prontitud la emergencia.
Sin embargo, pese a esa situación, el informe del operador XM, que se encarga de monitorear todos los embalses en el país, dice que los niveles subieron al 29,52 %, una buena noticia en medio de esta situación, ya que cuando inició la crisis estaban sobre el 26 %.
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