El 22 de mayo de 2025, las autoridades confirmaron el hallazgo del cuerpo sin vida de Wilmary Carolina Guerra Montilla, una mujer de 32 años que había sido reportada como desaparecida desde el 18 de septiembre de 2023 en el Atlántico.
Su familia y amigos mantuvieron la esperanza durante meses, hasta que la búsqueda finalizó tras descubrir que fue enterrada en una finca cercana al municipio de Manatí, un hecho que ha conmocionado a la comunidad local y pone nuevamente en foco la violencia de género en la región.
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Durante la investigación, salieron a la luz varios detalles relevantes. Se conoció la existencia de un video que Wilmary Carolina habría compartido por medio de un grupo de WhatsApp con amigas en República Dominicana y enviado también a su padre.
En el video, ella se mostraba tranquila en una finca, mencionando que había ido a pasar dos días y que regresaría a la ciudad al día siguiente. Describía el entorno campestre y manifestaba sentirse en paz, sin señales aparentes de que estuviera en riesgo.
“Estamos acá en una finca, viendo la naturaleza, casi ni veo porque estoy en el sol, con estas hermosas vacas que están allá, acostadas, tiradas, echadas, mírenlas, bellas. Es un ambiente fresco y agradable, qué paz”, indicó Wilmary en el video que se viralizó en redes sociales.
#LasNoticias Después de casi dos años de intensa búsqueda, fue hallado enterrado en una finca del municipio de Manatí el cuerpo de Wilmary Carolina Guerra Montilla. pic.twitter.com/jVnsJ1FHda
— Las Noticias de Telecaribe (@LasNoticiasTel) May 26, 2025
La familia, especialmente Wilmer José Guerra Rosado, padre de la víctima, nunca bajó la guardia en la búsqueda de respuestas. Manifestó dudas sobre la posible participación de la expareja de su hija, Franklin Trillos, en los hechos.
Según relató al diario El Heraldo, recibió mensajes anónimos que señalaban la posible ubicación de Wilmary, inicialmente en Aguada de Pablo y luego en la zona entre Manatí y Sabanalarga, específicamente en una finca llamada Las Palmitas.
Fue a partir de estas pistas y del propio video enviado por la joven que familiares y autoridades lograron identificar el predio correcto para la búsqueda.
De acuerdo con información recogida por El Heraldo, residentes de la zona confirmaron que el encargado del terreno era Gleimer David Trillos Yance, hermano de Franklin Trillos, aumentando las sospechas alrededor del entorno cercano a la víctima.
“Me dijo que él había llegado del trabajo el 18 en la tarde y que su madre le contó que Wilmary ya se había ido con una bolsita negra, pero que no sabía para dónde. Esto ocurrió en febrero de 2024. A partir de ahí la Fiscalía desplegó drones en abril y realizó una inspección con soldados, antropólogos y técnicos en criminalística, pero en ese momento no encontraron nada”, señaló.
El proceso de localización del cuerpo de Wilmary Carolina Guerra no fue sencillo. Su padre relató que luego de las denuncias y mensajes, la Fiscalía General de la Nación desplegó operativos con drones, soldados, antropólogos y expertos en criminalística en abril de 2024.
Inicialmente, estos esfuerzos no arrojaron resultados positivos, pero la persistencia de la familia y la colaboración de las autoridades permitieron hallar el lugar exacto meses después.
Tanto la información ciudadana como la utilización de tecnologías y el trabajo conjunto entre familiares y autoridades fueron determinantes para esclarecer el paradero de la joven.
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