El Colombiano es un grupo editorial multiplataforma con más de 110 años de existencia. Nació en la ciudad de Medellín en Antioquia. Fundado el 6 de febrero de 1912 por Francisco de Paula Pérez, se ha especializado en la investigación y generación de contenidos periodísticos para diferentes plataformas en las que provee a las audiencias de piezas mult...
Ángela María Buitrago, ministra de Justicia, en su pasado como fiscal se enfrentó a políticos con nexos paramilitares y se atrevió a investigar a generales que parecían intocables dentro de la Fuerza Pública. La apodaban como “La fiscal de hierro”.
Este jueves, sin embargo, reconoció que perdió la batalla contra las redes clientelistas que se habría tomado el Gobierno de Gustavo Petro: renunció.
(Vea también: Benedetti, con el agua al cuello: denunciará a ministra de Justicia, su nueva enemiga)
La carta de su salida está firmada desde hace un mes. El pasado 12 de abril se sentó a escribir, “de a poco”, las líneas en las que le denunciaba al presidente la injerencia de terceros en su cartera.
“Hice llamadas, envié mensajes, intenté reunirme con el presidente para contarle, pero no fue posible. Ante la prolongación de sus viajes, preferí pasar mi carta de renuncia de inmediato”, señaló Buitrago.
En efecto, este 15 de mayo se conoció la carta de renuncia irrevocable de la ministra de Justicia. Estará en la cartera hasta el 1 de junio: duró once meses en el cargo.
“Mis actuaciones no dependen de influencias, ni amenazas, persuasiones, ni interferencias o intereses políticos”, se lee en la carta de renuncia.
Renuncia de la ministra de Justicia en Colombia
Detrás de esas presiones estarían dos personajes que, hace poco llegaron a la cabecera del Gobierno, pero que se han convertido en funcionarios protagónicos: Armando Benedetti, ministro del Interior y Angie Rodríguez, directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre).
El primer atisbo de irregularidad asomó el 11 de marzo pasado. Ese día la ComisiónSéptima del Senado hundió virtualmente la reforma laboral.
Entonces llegó la aparente represalia. Benedetti cogió el teléfono y le pidió a Buitrago sacar al entonces director de la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC).
Se trataba de Ludwing Valero Sáenz, un abogado que habría llegado a ese cargo por recomendación de Miguel Ángel Pinto, senador de la Comisión Séptima.
“Sacaron a una persona, que además no traje yo, él ya estaba allí y conocía bien el sector. Lo sacaron no sé por qué. En estos momentos, en esa área tan importante no hay un titular con la capacidad y conocimiento para manejar la USPEC”, apuntó la ministra en diálogo con Caracol Radio.
Buitragó narró que se opuso a salir del director de la USPEC. Entonces, Angie Rodríguez procedió. Llamó a Valero Sáenz y el 12 de marzo la carta de renuncia ya estaba radicada, firmada y aceptada.
La ministra aseguró que Benedetti y Rodríguez le pidieron abrirle espacio en esa institución a unos personajes que no cumplían con los requisitos mínimos para acceder a ese cargo público. Devolvió todas las hojas de vida y nombró un reemplazo provisional.
(Vea también: Corte Suprema tomó decisión sobre dos ministros de Petro: Benedetti, protagonista)
Hoy la USPEC está bajo la dirección encargada de Fidel Ignacio Espitia, director del área de Gestión Contractual.
“Las personas prestan un servicio y no son simplemente muebles que usted quita y pone. Hay que mirar los resultados y, desde ese punto de vista, también sus capacidades”, apuntó Buitrago.
El pasado 7 de mayo la ministra viajó a Washington para hablar con el Gobierno de Estados Unidos sobre la estrategia de Colombia en la lucha contra las drogas. La reunión era clave en tanto se acerca una decisión de la Casa Blanca sobre la certificación –o no– del país en la lucha contra el narcotráfico.
Buitrago dejó el Ministerio bajo el encargo de su secretario general. Entonces, dijo ella, la directora del Dapre volvió a llamar y aseguró que el encargo debía quedar en otro funcionario.
“Yo me opuse rotundamente, me dijo que era orden del presidente, pero independientemente de eso yo había dejado un encargado de toda mi confianza. Ahí hubo una discusión”, apuntó Buitrago.
La funcionaria también advirtió que le pidieron cambiar la Dirección de la Política de Drogas.
Buitrago asumió como ministra de Justicia el 8 de julio del año pasado. Llegó a la cartera en reemplazo de Néstor Osuna. También fue una de las mujeres ternadas por el presidente Petro para fiscal general.
“Agradezco la oportunidad de haber servido al país desde esta cartera y de haber contribuido, junto a un equipo comprometido, leal y honesto, al fortalecimiento del Estado de Derecho, la defensa de los derechos humanos y la modernización del sistema de justicia”, puntualizó la ministra.
Buitrago también fue una voz disonante dentro del Gobierno. Se opuso, por ejemplo, a la idea de convocar a una asamblea constituyente y cuestionó la política de paz total del presidente Petro y la crisis de seguridad en varios departamentos.
Buitrago afirmó que durante su gestión trató de implementar avances en materia de dignidad para las personas privadas de la libertad, en entornos seguros, casas de justicia y protección de derechos de todos los colombianos.
La salida de la ministra ya generó tensiones dentro del Gobierno y el presidente Petro solo regresa de su viaje a China este 17 de mayo.
“No tengo facultad ni poder para pedir renuncias”, afirmó Benedetti ante las acusaciones. El ministro del Interior aseguró que ya le dio poder a un abogado para denunciar a Buitrago por injuria y calumnia. Lo mismo harán desde el Dapre.
Cuando se desempeñó como fiscal, en medio de amenazas, investigó y acusó a altos mandos militares por la operación de retoma al Palacio de Justicia el 6 y 7 de noviembre de 1985. Procesó a el general (r) Jesús Armando Arias Cabrales y el coronel (r) Alfonso Plazas Vegas. Ambos terminaron en prisión por su responsabilidad en las desapariciones forzadas.
En su despacho, Buitrago llevó otros procesos de renombre como la condena contra el exgobernador Edilberto Castro, condenado por el asesinato de tres líderes políticos en el Meta. Lideró la acusación contra Jorge Noguera, exdirector del extinto DAS, por vínculos paramilitares. También auspició la condena contra el exfiscal Guillermo Valencia Cossio por nexos con alias Don Mario.
* Pulzo.com se escribe con Z
LO ÚLTIMO