El criminal reconocido con el alias de ‘Satanás’, de nacionalidad venezolana y 30 años de edad, fue capturado en Ecuador y entregado a las autoridades colombianas. Recientemente, se encontraba recluido en la cárcel de Palogordo, Santander, pero su actividad criminal persistía estando tras las rejas.
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Según fuentes del Inpec, el delincuente continuaba dando órdenes desde la cárcel para mantener extorsiones y otras acciones criminales en Bogotá. Con el objetivo de frenar su actuar delincuencial esa identidad, en conjunto con la Policía Nacional, decidió trasladarlo desde la cárcel de Palogordo a la Tramacua, de Valledupar, un penal de mayor seguridad (en la que también estuvo recluido Luis Alfredo Garavito).
Esa estrategia ya se había aplicado con éxito en casos anteriores, como el del Negro Ober en Barranquilla. Ese traslado busca evitar que alias ‘Satanás’ continúe amenazando a comerciantes, policías y la comunidad en general desde prisión.
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, rechazó las amenazas del criminal y solicitó acciones contundentes a las autoridades. El general Daniel Gualdrón, comandante de la Policía de Bogotá, creó un grupo especializado para investigar las amenazas y fortalecer los mecanismos de denuncia.