El trágico accidente ocurrido el 6 de septiembre en el barrio Cabañas de Bello, en el que una van escolar presuntamente falló en los frenos y atropelló a dos mujeres en motocicleta, con resultado fatal para una de ellas, ha reavivado la preocupación nacional sobre la seguridad vial en Colombia. Este siniestro subraya problemas estructurales en la movilidad urbana, particularmente relacionados con el precario mantenimiento del parque automotor y las limitaciones en la cultura de tránsito seguro. Según el informe del Observatorio Nacional de Seguridad Vial de Colombia (ONSV) publicado en 2024, aproximadamente un 45% de los accidentes de tránsito en el territorio nacional pueden atribuirse a fallas mecánicas, en especial en sistemas críticos como frenos y dirección.
En el caso de Bello, donde la van escolar quedó fuera de control tras el desperfecto, se cuestiona la efectividad de los controles técnicos exigidos por las autoridades. De acuerdo con evaluaciones recientes del Ministerio de Transporte de Colombia (2025), no siempre se efectúan inspecciones periódicas con el rigor necesario, un problema particularmente notorio en vehículos de servicio público o escolar que transportan pasajeros altamente vulnerables. La escasez de supervisión, sumada al gran flujo de motocicletas en las vías urbanas, incrementa el riesgo y la exposición de los usuarios, especialmente en zonas donde la señalización es insuficiente.
Este lamentable hecho no es un acontecimiento aislado. Solo tres días antes, otro motociclista perdió la vida al colisionar con un camión en el barrio Obrero de Bello, evidenciando que la inseguridad vial es una realidad constante en este municipio y en muchas ciudades colombianas. Los informes oficiales y los testimonios publicados por medios como El Espectador documentan la urgencia de reformas en la infraestructura, así como la necesidad de programas educativos y sanciones más efectivas para disuadir comportamientos imprudentes.
Expertos como Ana María Torres, docente de la Universidad Nacional, han señalado repetidamente a través de entrevistas con medios reconocidos que la proliferación de vehículos mal mantenidos, junto a la falta de estrategias de control, agravan la tasa de mortalidad vial, afectando a peatones y motociclistas de manera desproporcionada. Coincidiendo con las recomendaciones de organismos internacionales y nacionales, destacan la importancia de promover inspecciones técnicas rigurosas y campañas de sensibilización entre todos los usuarios de las vías.




Una mirada más amplia apunta también a la responsabilidad de las autoridades municipales y nacionales, no solo en hacer cumplir las normas, sino en adoptar soluciones tecnológicas. Experiencias como la plataforma NINA, referenciada por el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística y LatAm Journalism Review en 2024, demuestran que la recopilación de datos y el monitoreo inteligente de puntos críticos pueden anticipar riesgos y ayudar en la planificación de estrategias preventivas. Esta integración de tecnologías digitales puede resultar fundamental para reducir tragedias y proteger a los sectores más expuestos.
Al final, el accidente en Cabañas convoca a un debate profundo sobre la seguridad vial en Colombia, que abarca desde la necesidad de revisar y mantener los vehículos hasta el fortalecimiento de la infraestructura y la adopción de sistemas inteligentes de prevención. Es un llamado urgente a la acción coordinada entre gobierno, ciudadanía y actores del sector transporte.
¿Qué es una inspección técnica vehicular y por qué es importante? La inspección técnica vehicular es un proceso de evaluación periódica que permite verificar el estado mecánico y de seguridad de un vehículo para garantizar que cumple con los requisitos necesarios para circular en condiciones óptimas. En el contexto de Colombia, la falta de cumplimiento riguroso de esta obligación, tal como advierte el Ministerio de Transporte, ha sido un factor recurrente en los accidentes, ya que vehículos con deficiencias graves continúan en uso, poniendo en peligro a conductores y peatones. Comprender la importancia de estos controles es fundamental para fortalecer la seguridad vial y salvar vidas.
¿Por qué los motociclistas son considerados usuarios vulnerables en la vía? El alto nivel de exposición de quienes conducen motocicletas se debe a la escasa protección física frente a otros vehículos, lo que los convierte en uno de los grupos más afectados en accidentes, como lo documentan tanto el ONSV como reportes periodísticos recientes. Sumado a esto, factores como la insuficiente infraestructura, señalización deficiente y la convivencia diaria con automotores más grandes aumentan considerablemente los riesgos. La protección y educación dirigida a motociclistas es un componente esencial en toda estrategia de movilidad segura.
* Este artículo fue curado con apoyo de inteligencia artificial.
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