Cuando Chile extraditó a Alberto Fujimori, Perú se comprometió a consultar con las autoridades chilenas la posibilidad de juzgarlo por otros casos pendientes ante la justicia. Uno de esos casos es el tráfico de armas a las Farc, según el gobierno peruano.

La Corte Suprema de Chile concedió la extradición a Fujimori por dos casos de derechos humanos y cinco de corrupción, pero no la autorizó por el tráfico de armas a la guerrilla colombiana, entre otros.

“Se aprobó la resolución suprema mediante la cual se accede a la solicitud de ampliación de extradición activa del ciudadano peruano Alberto Fujimori para ser extraditado de la República de Chile y ser procesado en Perú por la presunta comisión de delitos de suministro ilegal de arma y fuego y otros”, anunció el miércoles el presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido.

El pedido se aprobó tras la solicitud del ministerio de Justicia y está relacionado con la venta triangular organizada desde Lima de 10.000 fusiles jordanos a favor de la guerrilla de las Farc en 1999, cuando Fujimori era presidente.

“Tiene que ver con haber provisto a los grupos terroristas en Colombia, que son las Farc de armas cuando el expresidente Alberto Fujimori estaba en funciones”, explicó Bellido durante una conferencia de prensa.

En septiembre de 2006, un tribunal peruano condenó a 20 años de cárcel por este caso al brazo derecho de Fujimori, Vladimiro Montesinos, mientras otras cinco personas recibieron penas de 15 años.

La venta triangular de los 10.000 fusiles jordanos se planeó entre marzo y agosto de 1999 a través de cuatro vuelos para lanzar las armas en paracaídas en el poblado colombiano de Barrancominas, fronterizo con Brasil. Según el Ejército de Colombia, el cargamento fue pagado con cocaína y contó con la mediación del detenido narcotraficante brasileño Luiz Fernando da Costa (‘Fernandinho Beira Mar’).

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Tras 10 años en el poder, Fujimori abandonó la presidencia de Perú en 2000 y se refugió durante cinco años en Japón, su segunda patria, antes de viajar en noviembre de 2005 a Chile, donde fue detenido y extraditado a su país en septiembre de 2007 para ser juzgado por cinco casos de corrupción y dos de violaciones a los derechos humanos.

Fujimori cumple una condena de 25 años en una cárcel peruana por crímenes de lesa humanidad ocurridos en el marco de la lucha contra las guerrillas de Sendero Luminoso y el MRTA. El expresidente, de 83 años, es padre de la excandidata derechista Keiko Fujimori, quien perdió las pasadas elecciones presidenciales denunciando un supuesto fraude.