Los enfrentamientos entre presos en esta cárcel de Ecuador, que se iniciaron el viernes por la noche, se extendieron hasta el sábado al entrar en escena otras bandas de los bloques 7 y 12 de la misma prisión.

En este momento están ocurriendo nuevos incidentes en el interior de la Penitenciaría del Litoral (Guayas 1), se están produciendo ataques de un pabellón a otro”, expresó el vocero presidencial, Carlos Jijón, en Guayaquil.

Agregó que el presidente Guillermo Lasso, que lidera un comité de crisis en ese puerto, invitó a “sectores de la sociedad civil para empezar a organizar un diálogo al interior de la cárcel y poder detener la barbarie que está ocurriendo”.

Jijón reportó más tarde que “la situación está controlada en toda la Penitenciaría” con la intervención de 900 policías.

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Los internos se enfrentaron con armas de fuego y explosivos, pese al estado de emergencia que rige en las sobrepobladas cárceles de Ecuador , donde este año han sucedido de las mayores matanzas en la historia penitenciaria de Latinoamérica.

Los nuevos choques estallaron cuando uno de los grupos invadió el pabellón 2 para matar a miembros de una banda enemiga. Previamente, Pablo Arosemena, gobernador de la provincia del Guayas, en cuya jurisdicción está Guayaquil (suroeste), describió que fueron “cruces de bala muy intensos” y una “situación de salvajismo”.

La comandante de la Policía, general Tannya Varela, informó sobre el trágico resultado de las disputas que han sumido al país en una anarquía carcelaria sin precedentes. En un primer reporte habló de 58 reclusos muertos, pero después la Fiscalía elevó a 68 el número de víctimas mortales e informó de 25 heridos.

“No sabemos cuántos muertos”

Imágenes divulgadas por redes sociales muestran a unos reclusos prendiendo fuego a cuerpos ensangrentados. En una transmisión en vivo desde Facebook, un preso suplica ayuda.

“Hay muchos heridos y hay muertos en la parte de abajo, no sabemos cuántos”, dice el hombre antes de alertar que los agresores estaban traspasando los muros a través de “huecos” abiertos con explosivos.

En la mañana, policías bajaron un cuerpo por los muros ensangrentados, según observó un fotógrafo de la AFP. En una de sus imágenes también se ve el cadáver de un hombre en uniforme naranja en la parte alta del penal.

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Lasso envió desde Twitter sus “condolencias” a las familias de las víctimas y reclamó a la justicia “herramientas institucionales idóneas” para enfrentar la emergencia carcelaria. Criticó veladamente a la Corte Constitucional por impedir el ingreso de militares a las prisiones con el estado de emergencia.
Con las restricciones impuestas por los jueces, la medida de emergencia se extenderá hasta finales de este mes.

La revuelta se apoderó de la penitenciaría, donde en septiembre 119 reclusos fallecieron en una cruel carnicería con decapitados y quemados, y que derivó en la declaratoria del estado de excepción.

Reclusos la emprendieron contra rivales en el patio, en un intento por “doblegarlos” tras la excarcelación de un cabecilla, según el gobernador Arosemena. Con la reciente matanza ya son más de 320 los muertos en las cárceles ecuatorianas en lo que va de año.

Los enfrentamientos se prolongaron por horas, durante la noche y con el sistema eléctrico de la cárcel inhabilitado por los reos. La policía evitó ingresar por el alto riesgo que significaba intervenir en medio de los cruentos ataques, según autoridades.

Presos por la paz

Desde temprano decenas de familiares se agolparon fuera de la cárcel, algunos con pancartas donde se leía “son seres humanos, auxílienlos”, en medio de un despliegue policial y militar apoyado por una tanqueta.

AFP
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“No es justo que muera por robar un celular”, señaló a la AFP Félix González, quien acudió a la morgue policial en busca de su hijo.

El organismo a cargo de las prisiones (SNAI) informó que unos 8.400 reos de cárceles de las ciudades andinas de Cuenca y Latacunga “se negaron a ingerir alimentos” el sábado en “aparente muestra de solidaridad” con sus compañeros de la Guayas 1. En el reclusorio de la costera Esmeraldas, decenas de reos pedían paz a través de pancartas.

La penitenciaria Guayas 1 es una de las más importantes del país, con 8.500 internos y una sobrepoblación del 60 %. Bandas rivales vinculadas al narcotráfico libran una cruenta disputa en esa prisión, distribuida en doce pabellones. Las autoridades han identificado al menos a siete grupos, entre ellos los Choneros, Lobos, Tiguerones y Latin King.

Con capacidad para 30.000 personas, las prisiones ecuatorianas están ocupadas por 39.000, con una superpoblación del 30%.