Así lo afirmó Jorge Wated, el funcionario designado por el gobierno para atender parte de la crisis en esa provincia.
Entre esos 6.703 muertos hay víctimas del coronavirus, casos sospechosos y también muertos por causas naturales, dijo el funcionario, que no precisó el porcentaje de decesos debidos a la pandemia.
Guayas concentra el 70 % de los más de 8.200 casos de coronavirus registrados hasta el jueves en Ecuador, incluidos 403 muertos.
De ese total, 4.353 infectados fueron detectados en Guayaquil, epicentro de la pandemia en el país y una de las ciudades más castigadas de Latinoamérica.
En esa ciudad portuaria, con unos 2,7 millones de habitantes y capital económica del país, muchas personas han perdido la vida esperando recibir atención en hospitales o viviendas.
Al colapso del sistema sanitario le siguió el funerario, lo que hizo que familias pasaran varios días con los cuerpos en sus casas antes de que el gobierno activara una fuerza militar y policial para retirar los cadáveres.
El toque de queda impuesto por el gobierno para tratar de detener la propagación del COVID-19, ralentizó el trabajo de las funerarias, y en algunos casos dejó de prestarse el servicio por el miedo de los trabajadores a contagiarse.
Wated señaló que la fuerza de tarea conjunta que encabeza logró retirar alrededor de 1.400 cadáveres en las últimas tres semanas, 800 de ellos de casas y el resto de hospitales, para darles sepultura.
“Tenemos todavía una cifra de casi 700 personas que aspiramos sepultar entre esta semana y máximo la próxima, que lo vamos haciendo poco a poco”, dijo el funcionario este jueves.
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