Asimismo, la Casa Blanca indicó que los Guardianes de la Revolución deberán “asumir la plena responsabilidad por las consecuencias de sus acciones imprudentes”, instándolos tanto a ellos como “a sus milicias, incluido Hezbolá, a no ir más lejos en la provocación”.

“Estados Unidos también hace un llamamiento a todas las naciones para que digan que las acciones del régimen iraní representan una grave amenaza para la paz y la estabilidad internacionales”, añadió la Casa Blanca.

La tensión entre Irán e Israel ha aumentado fuertemente en Siria, donde el estado judío dice haber bombardeado decenas de objetivos iraníes en respuesta a un ataque directo atribuido a la República Islámica contra sus fuerzas.

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De acuerdo con los israelíes, la brigada Al Qods, una unidad de élite de los Guardianes de la Revolución a cargo de las operaciones externas, lanzó el miércoles poco después de las 21H00 GMT una veintena de cohetes de tipo Fajr y Grad contra las primeras posiciones en la parte del Golán ocupada por Israel, del otro lado de la línea divisoria.

El hecho se produjo un día después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara la retirada de su país del acuerdo nuclear iraní de 2015 entre Teherán y las principales potencias, aumentando los temores de una mayor escalada en la región.