De acuerdo con Dora María Téllez, exministra de Salud de ese país, Ortega se encuentra en cuarentena junto con sus familiares en una isla privada, por miedo a contraer la enfermedad respiratoria.
“Es una costumbre de él desde que es presidente. En el mejor de los casos, está en un centro turístico resguardado, porque es un cobarde y sabe que la COVID-19 lo podría matar”, manifestó Téllez en la W Radio.
Juan Carlos Ortega Murillo (uno de los hijos del presidente), entre tanto, publicó dos fotos en sus redes sociales disfrutando con su familia en una playa, con el mensaje: “Tenemos un país único”, lo que aumentó los rumores de que Ortega está aislado en un isla privada.
Ante la ausencia del mandatario, que no participa en actos públicos desde el 21 de febrero pasado cuando lo hizo en uno con el Ejército, ha sido su esposa, Rosario Murillo –quien es la vicepresidenta de Nicaragua– la que ha llevado la voz en medio de la emergencia sanitaria.
Téllez, por otro lado, enfatizó en la emisora que el régimen sandinista está mintiendo con respecto a las verdaderas cifras del coronavirus y “que hay muchos más casos”, que los reportados oficialmente.
A pesar de que estaría en aislamiento preventivo para evitar contagiarse, el mandatario y su gobierno siguen promoviendo eventos masivos públicos y aglomeraciones. Incluso, no ha decretado el confinamiento nacional y las instituciones educativas siguen abiertas.
Debido a la ausencia de Ortega, la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH) instó a la ciudadanía a desobedecer “los llamados irresponsables del régimen Ortega Murillo frente al COVID-19” y evitar aglomeraciones, no acudir a las playas y sumarse a la campaña ‘Quédate en casa’.
El organismo, además, le ordenó este lunes al mandatario a que aparezca en público y así determinar si existe un vacío en el poder o un abandono del cargo. “La ANPDH emplaza al señor José Daniel Ortega para que en un plazo de 72 horas comparezca ante la nación nicaragüense y constatar que está al frente de la gestión pública del Estado”, manifestó Álvaro Leiva, secretario ejecutivo de la ANPDH.
Según los últimos reportes oficialistas, en el país centroamericano se han registrado seis casos de contagio con el virus y una sola muerte. No obstante, Dora María Téllez aseguró que los infectados son más de 5.000.
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