Sobre las horas de la tarde de este viernes, una de las aeronaves que participaba en el combate de los virulentos incendios que arrasan el centro y sur de Chile se desplomó a tierra y ocasionó la muerte de sus dos ocupantes.

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El helicóptero, que prestaba sus servicios para la Corporación Nacional Forestal (Conaf), institución autónoma del Estado chileno, cayó sobre un pastizal ubicado a pocos metros de una de las montañas que presenta la emergencia.

“Muy tristes por el accidente del helicóptero en que falleció el piloto y el mecánico que trabajaban en el combate del fuego en la comuna de Galvarino en La Araucanía”, escribió en su cuenta de Twitter el ministro chileno de Agricultura, Esteban Valenzuela.

Desde la red de emergencia del país austral también se lamentó lo sucedido y se les envió un mensaje de condolencia a las familias de los fallecidos.

“Desde @reddeemergencia lamentamos el sensible fallecimiento de 2 brigadistas en Galvarino quienes se encontraban combatiendo los incendios forestales que afectan el sur del país. Nuestras oraciones están con sus familias y compañeros de trabajo”, aseguraron.

Con esas dos muertes, el número de personas fallecidas se elevó a siete. Las otras cinco víctimas perdieron la vida este viernes en la comuna de Santa Juana, en la región del Biobío y a 550 kilómetros al sur de Santiago.

Según el Ministerio Público, cuatro personas murieron en dos accidentes de tránsito tratando de huir de las llamas mientras que una bombera sufrió un infarto en plenas labores de extinción.

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Las imágenes recuerdan a la ola de incendios que azotó el sur de Chile en 2017, los más graves en décadas y en los que murieron una decena de personas.

Los incendios coinciden con una larga sequía que ya dura más de trece años y con una ola de calor inédita en el sur, con temperaturas que pueden llegar en las próximas horas hasta los 40 grados en zonas del sur.