El suelo estadounidense tendrá que vivir horas de frío extremos durante el fin de semana. Tal y como ocurrió en diciembre, cuando parte del país vivió una tormenta de nieve sin precedentes en los últimos años, ahora experimentará un fenómeno poco visto.
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El primer anuncio de la llegada de esta explosión ártica fue la cancelación de al menos 6.300 vuelos en estados como Texas, Oklahoma, Tennessee, Arkansas y Kentucky, debido a una fuerte tormenta invernal.
El fenómeno traerá a las regiones de Nueva Inglaterra, Delaware, Maryland, Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania y Washington DC, una caída repentina de temperaturas, ráfagas de viento, nevadas, lluvias y ventiscas.
Qué es la explosión ártica que impactará EE. UU.
Se trata de un frente frío que proviene del norte y trae consigo bajas temperaturas, nevadas, lluvia y fuertes vientos. El aire frío que viene del Ártico es empujado hacia el sur por las corrientes atmosféricas y eso crea las llamadas explosiones árticas, de acuerdo con Ryan Maeu, meteorólogo entrevistado por la agencia AP y cuyas declaraciones fueron recogidas por Univisión.
El Servicio Meteorológico Nacional (National Weather Service, NWS), le recomendó a las personas evitar salir al exterior y de tener que hacerlo, abrigarse adecuadamente, pues las temperaturas podrían llegar a los -35 grados centígrados.
El Centro de Predicción del Clima vaticinó que los vientos helados que se presentarán en la región de Nueva Inglaterra “podrían ser los más fríos que se hayan sentido en décadas”.
Según el NWS, la explosión ártica estaría en su punto más alto entre el viernes en la noche y el domingo en la tarde. A partir de ello, “una cresta en el aire que se moverá de oeste a este de viernes a sábado ayudará a subir las temperaturas en la región, después de que tengan dos jornadas de frío”, señaló el servicio.
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