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Jornada sangriento en Damasco este domingo. Un hombre abrió fuego y luego accionó su cinturón explosivo en la Iglesia San Elías del barrio Dwelaa de la capital siria. El Ministerio del Interior sirio afirmó que el atentado suicida fue perpetrado por un miembro del grupo yihadista Estado Islámico. El número de muertos asciende a 22 personas y hay 63 heridos. Reportaje en el hospital Al Mujtahid de Damasco.
Con la corresponsal de RFI en Damasco, Manon Chapelain
En los pasillos del hospital Al Mujtahid, las familias de los heridos están desesperados. Hay zonas donde el suelo está inundado de sangre. Por todos lados, hay mujeres que corren y gritan después de enterarse de que varios miembros de sus familias han sido asesinados en el atentado.
“Están todos muertos, nos queda un solo un hermano al que están operando en el hospital francés”, explica a RFI esta mujer que no encuentra consuelo.
El kamikaze abrió fuego en un primer momento desde el exterior de la iglesia contra las vidrieras y luego entró al templo por la puerta principal. En su mano llevaba una granada y amenazó con activarla. Fue entonces cuando los fieles, lo empujaron hacia el exterior antes de que hiciera estallar si cinturón de explosivos.
“La explosión hizo volar por los aires a nuestros maridos. ¿Qué más quieren? Nuestros maridos nunca habían matado a nadie, ni siquiera a una hormiga. ¿Por qué quieren más? Somos cristianos, rezamos a nuestro Dios todos los días. No somos infieles. Entonces, ¿qué quieren?”, se pregunta desesperaba una mujer desde el hospital.
El cura que oficiaba en la iglesia tiene la barba manchada de sangre, su teléfono suena para anunciarle una muerte más, esta vez una mujer. “Recemos por ella”, dice con lágrimas en los ojos.
En el exterior del hospital, los voluntarios se agolpan para donar sangre. “En este hospital todavía hay cuatro personas que no han sido identificadas”, explica uno de los médicos.
Condenas internacionales
Turquía, que apoya a las nuevas autoridades de Damasco, “nunca permitirá que Siria, un país vecino y hermano, que por primera vez tras años de opresión y guerra mira a su futuro con esperanza, sea arrastrado de nuevo a la inestabilidad por grupos terroristas”, declaró el lunes el presidente turco, Recep Tayip Erdogan, en su cuenta X.
La Unión Europea ha condenado un atentado “abominable y cobarde” contra los cristianos en Siria. “Es un serio recordatorio de la necesidad de redoblar los esfuerzos contra la amenaza terrorista y garantizar la derrota duradera del grupo Estado Islámico y otras organizaciones terroristas”, declaró un portavoz de la Comisión Europea.
Tom Barrack, enviado de Estados Unidos para Siria, también reaccionó y calificó el ataque de cobarde. “Estos terribles actos de cobardía no tienen cabida en la nueva sociedad de tolerancia e inclusión que los sirios están construyendo”, dijo.
El ataque de este domingo es el peor atentado en Siria desde que las fuerzas dirigidas por islamistas derrocaron al ex presidente Bashar al Asad el 8 de diciembre pasado, mientras que la seguridad sigue siendo uno de los mayores retos para las nuevas autoridades encabezadas por Ahmed al Sharaa, presidente de la República Árabe Siria desde el 29 de enero. (RFI y AFP)
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