Santiago Alarcón fue un acérrimo contradictor del gobierno de Iván Duque, por los abusos y muertes que se presentaron durante el paro nacional de 2021 y los asesinatos de líderes sociales en diferentes regiones del país.
Esa situación parece que no ha cambiado desde la llegada de Gustavo Petro al poder, pues según Indepaz, en lo que va corrido de 2022 se han presentado cerca de 72 masacres en todo Colombia. La organización social pidió que el Gobierno refuerce las labores de restablecimiento de los derechos de los campesinos, líderes sociales y población indígena.
Ante estos hechos que lamentar, dos de los que se han pronunciado son el actor Santiago Alarcón y la cantante Adriana Lucia, quienes se refirieron sobre los sistemáticos asesinatos que se han presentado en los últimos días en los departamentos de Cauca y Nariño.
En primer lugar, la intérprete arremetió contra un sector de la oposición (qué, según ella) está contenta de que las masacres sigan presentándose, ya que (dice) solo se acordaron de que estas existían cuando Gustavo Petro llegó a la Presidencia.
“Parecen estar alegres de ver que asesinen gente que lucha por su gente. Desean de todo corazón que las masacres no paren, hallan placer en ello. A esa gente lo único que le importa son ellos mismos. Nada los llena”.
De inmediato, el que replicó el trino fue Santiago Alarcón, quien también lanzó dardos a la oposición de Petro: “Lo triste es que ahora sí son masacres, antes solo eran homicidios colectivos”.
Lo triste es que ahora sí son masacres, antes solo eran homicidios colectivos. Hace rato que nos estamos matando pero para algunos solo hasta ahora está sucediendo.
Pongámonos de acuerdo en eso.
Son masacres y hay que condenarlas siempre. https://t.co/hFJejXLHlS— Santiago Alarcón U (@Santialarconu) August 30, 2022
Petro pidió reforzar seguridad en Colombia
Precisamente, Gustavo Petro el pasado lunes dio una orden para asegurar la tranquilidad en la nación: “Le he pedido al ministro de Defensa garantizar la protección de la vida de los colombianos en todo el territorio. Colombia no puede ser el país de las masacres, esa historia de sangre debe quedar atrás”.
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