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El cantante Beto Zabaleta avivó la memoria colectiva del folclor vallenato al publicar en sus redes sociales una imagen cargada de historia y sentimiento: un retrato junto a Jorge Oñate e Israel Romero, piezas esenciales en la construcción de este género musical. Acompañada de la emblemática canción ‘Mi primera canción’, compuesta por Rosendo Romero Ospino y contenida en el álbum ‘Orgullo Guajiro’, la fotografía generó gran eco entre los seguidores, quienes celebraron el encuentro de tres leyendas del vallenato, expresando nostalgia y reconocimiento por sus contribuciones irremplazables al repertorio cultural colombiano [Fuente original].
El impacto de dicha publicación trasciende la simple evocación: constituye un recordatorio vivo del peso que ostentan Oñate, Romero y Zabaleta en la consolidación y proyección del vallenato. Jorge Oñate, fallecido en 2021 según reportó El Espectador, es venerado como uno de los intérpretes más influyentes en la evolución del género, aportando una sensibilidad narrativa y una calidad interpretativa que transformaron el modo en que se concibe este folclor. A su lado, Israel Romero, apodado con justicia el “Rey Vallenato”, logró, a través de su trabajo con Binomio de Oro, renovar y expandir el vallenato hacia dimensiones contemporáneas, sin perder el anclaje en sus raíces más profundas [El Tiempo, 2023].
Beto Zabaleta, oriundo de La Guajira y defensor de la tradición, representa la esencia más auténtica del vallenato, caracterizada por la transmisión oral de historias regionales y un profundo sentido de identidad guajira. El encuentro visual de estas tres figuras, recogido en una foto de archivo, es testimonio ineludible del pequeño grupo de creadores que dieron forma a la personalidad musical del Caribe colombiano.
La elección de ‘Mi primera canción’ como banda sonora de la publicación no es casual. Según la Fundación Casa de la Cultura Vallenata, el maestro Rosendo Romero Ospino es ampliamente reconocido por mantener vigentes la estética y la lírica propias del folclor guajiro. Esta “joya musical”, tal como la describen sus admiradores, captura la esencia emotiva del vallenato: nostalgia, orgullo regional y pasión por las historias sencillas pero universales de la región.




El valor de este tipo de recuerdos se amplifica en la era digital. Como subrayan estudios realizados por el Ministerio de Cultura de Colombia, el vallenato se posiciona como vehículo fundamental en la transmisión de valores y costumbres del Caribe colombiano, haciendo de cada evocación y registro una herramienta de salvaguardia patrimonial. Así, iniciativas como la de Beto Zabaleta revitalizan el diálogo intergeneracional, impulsando a nuevas audiencias a descubrir la importancia y belleza del folclor nacional.
No menos relevante es el papel de las redes sociales en la actualidad. De acuerdo con investigaciones de la Universidad Nacional de Colombia, plataformas digitales como las utilizadas por los músicos vallenatos hoy son claves para el resguardo de la memoria, permitiendo que canciones y fotografías adquieran nuevos significados y lleguen a públicos más diversos. Comentarios del público como “Maestros de maestros” y “Pura leña gruesa” son evidencia del aprecio sostenido y la vigencia cultural de figuras como Oñate, Romero y Zabaleta.
Comparativamente, el fenómeno de recuperación y dignificación musical a través de la digitalización no es exclusivo del vallenato. Tal y como apunta la Revista Musical Americana, géneros tradicionales latinoamericanos como la música regional mexicana o la murga uruguaya también han experimentado un resurgimiento gracias a las redes sociales, que funcionan como puentes intergeneracionales y garantes de un legado compartido.
En última instancia, la imagen publicada por Zabaleta es más que un simple recuerdo: es un acto de reconocimiento a la historia viva del vallenato y un llamado a preservar y defender la riqueza cultural que emana de su música y sus protagonistas. La fraternidad y el respeto entre estos maestros encarnan el espíritu de un género que continúa demostrando su vigencia e importancia tanto en Colombia como más allá de sus fronteras.
Preguntas frecuentes relacionadas
¿Quién fue Jorge Oñate y cuál fue su importancia en el vallenato?Jorge Oñate es considerado uno de los grandes renovadores y voces emblemáticas del folclor vallenato en Colombia. Su capacidad para interpretar historias y emociones a través del canto marcó una evolución en el género—pasando del formato tradicional a una expresión más elaborada y personalista. Oñate no solo ganó reconocimiento nacional sino también internacional, consolidándose como referente para nuevas generaciones y dejando una huella profunda en la historia de la música colombiana, según señala El Espectador.
Este legado sigue vivo en la actualidad, pues muchas de sus interpretaciones continúan siendo fuente de inspiración y estudio para músicos y folcloristas. Su fallecimiento en 2021 representó no solo una pérdida humana sino la partida de un símbolo cultural, recordado constantemente a través de homenajes como el de Beto Zabaleta.
¿Qué significa el término “Rey Vallenato”?El título “Rey Vallenato” se utiliza para designar a los músicos que se destacan en la interpretación del vallenato, especialmente en el Festival de la Leyenda Vallenata realizado anualmente en Valledupar. Este reconocimiento va más allá de lo técnico; implica también liderazgo, creatividad, aporte a la tradición y al repertorio del género.
El ejemplo más destacado es Israel Romero, quien, por su maestría en el acordeón y su papel clave en la agrupación Binomio de Oro, ha sido considerado un “Rey Vallenato”. Este título es motivo de gran orgullo dentro de la comunidad musical y representa una distinción que ayuda a preservar y visibilizar el legado del vallenato a nivel nacional e internacional.
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