La Procuraduría General de la Nación empezó a tomar acciones por el escándalo en la cárcel La Picota, en Bogotá, donde tres artistas fueron contratados para cantar en un evento en el que se decomisaron más de 200 botellas de whisky, 122 celulares, 19 parlantes, una mesa de juegos de casino y 400 millones de pesos.
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Ana del Castillo, una de las artistas involucradas, rindió indagatoria ante la autoridad judicial en declaraciones reveladas por Noticias RCN y en una audiencia en la que la cantante tuvo algunas lagunas en su relato. Además, desde la entidad informaron que adelantan la investigación para establecer qué pasó con los funcionarios del Inpec, encargados del pabellón de extraditables.
En primer lugar, la intérprete dio sus razones que la llevaron a aceptar cantar en La Picota y reveló si recibió algún pago por su presentación: “Yo tenía una presentación el día anterior y quise ir de corazón, era el día de la Virgen de los presos y no me dieron plata por eso”.
Ana del Castillo: cantante entregó su versión de fiesta en La Picota
Además, el citado medio contó que Castillo dio detalles de cómo fue su ingreso al penal y el tiempo de duración que tuvo su presentación, pues en la investigación se ha arrojado que ella aparece en los videos entrando el 21 de septiembre y saliendo el 26, afirmación que ella negó tajantemente.
“Falso de toda falsedad. Me pidieron cédula, entré como una persona normal. A las 11:00 de la noche entramos y a la 1:00 de la mañana salimos”, indicó.
El noticiero también reportó que la artista fue enfática en decir que salió junto a todos sus músicos del centro de reclusión y que no se quedó varios días junto a los presos extraditables: “Me fuí con mis cajeros, mis guacharaqueros, el guitarrista, el acordeonero y mi persona. Así como entramos, salimos”.
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