
La prescripción de una deuda es un mecanismo legal que extingue el derecho de un acreedor a exigir el pago de una obligación después de un determinado tiempo. Es decir, si pasa un tiempo considerable sin que este inicie acciones legales para cobrar la deuda, puede dejar de ser exigible.
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¿Qué tipos de deudas prescriben en Colombia?
En Colombia, la prescripción de las deudas varía según su naturaleza. Los plazos más comunes son de 3 y 5 años. Según el Ministerio de Justicia, las deudas que prescriben en el país se regulan de la siguiente manera:
- Corto plazo: deudas como las representadas por pagarés y letras de cambio suelen prescribir en un plazo de 3 años, como: las bancarias y las facturas.
- Largo plazo: deudas derivadas de contratos, documentos, promesas de compraventa y conciliaciones, entre otros, generalmente prescriben en un plazo de 5 años.
El vencimiento o la prescripción solo la puede decretar el juez si el deudor lo solicita.

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¿Cómo funciona la prescripción?
Para que una deuda prescriba, es necesario que transcurra el plazo establecido por la ley, en el Artículo 2536 del Código Civil Colombiano, sin que el acreedor haya iniciado ninguna acción legal para reclamar el pago. Este plazo comienza a contar desde el momento en que la deuda se hace exigible, es decir, desde la fecha en que debía pagarse.
Es importante tener en cuenta que la prescripción no opera automáticamente. Si el acreedor procede con alguna acción para cobrar la deuda, como enviar una carta de cobro o iniciar un proceso judicial, el plazo de prescripción se interrumpe y comienza a contar nuevamente.
*Este artículo fue escrito y curado por periodistas del equipo de redacción, con apoyo de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto.
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