Este martes primero de agosto, el hijo mayor del mandatario, Nicolás Petro Burgos, y su exesposa Day Vásquez, comparecen ante el Juzgado 74 de control de garantías de Bogotá en la audiencia de imputación de cargos citada por la Fiscalía General de la Nación.
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Petro Burgos debe responder por los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito. Para demostrar la culpabilidad del hijo del presidente, el fiscal Mario Burgos aseguró que el señalado tendría que ganar 200 millones mensuales para justificar los gastos que tuvo entre 2020 y 2022. Sin embargo, detalló que solo tenía un ingreso como diputado de la Asamblea Departamental del Atlántico (que no le alcanzaría para sus lujos).
“El señor Nicolás no cuenta con ninguna otra actividad económica que genere ingresos, de hecho, en la declaración de renta de 2020 y 2021 dijo que solo tenía rentas derivadas de su trabajo como diputado. Con un patrimonio para 2020 de 52 millones de pesos y deudas por 1,7 millones”, detalló el investigador.
El fiscal también explicó cuáles fueron los ingresos en una cuenta de ahorros que Petro Burgos tiene en el banco Davivienda, con lo cual buscó dejar en evidencia las presuntas irregularidades y el supuesto enriquecimiento ilícito.
- 2020: $ 44’209.846
- 2021: $ 217’470.687
- 2022: $ 223’305.655
“Conforme a los ingresos recibidos en la cuenta de ahorros de Davivienda y relacionados con su rol de diputado de la Asamblea Departamental, usted solo contaba para el año 2022 con 280 millones de pesos y, a pesar de ello, sacó en efectivo como 600 millones para la compra de una casa”, mencionó el fiscal.
Lujos que le pillaron a Nicolás Petro fueron revelados en la audiencia
El fiscal Mario Burgos aseguró en la audiencia que hay un patrimonio injustificado superior a los 1.000 millones de pesos por “ingresos clandestinos de dinero”.
En las cuentas que presentó el fiscal sobre los pagos del hijo del presidente llama la atención un pago por 56 millones de pesos de arriendo de una casa en el conjunto La Herradura, en Puerto Colombia, que luego habría negociado en 1.700 millones de pesos.
En este predio se habría pagado un anticipo de 699 millones de pesos. “Se estaba comportando como una persona de clase media arribista”, señaló el fiscal del caso.
Además, Burgos detalló que el hijo del presidente negoció una casa en Tubará (Atlántico) por 334 millones de pesos, un vehículo Mercedes-Benz en 200 millones de pesos e hizo compras en efectivo en tiendas de lujo como Salvatore Ferragamo y Carolina Herrera.
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