Por: El Colombiano

El Colombiano es un grupo editorial multiplataforma con más de 110 años de existencia. Nació en la ciudad de Medellín en Antioquia. Fundado el 6 de febrero de 1912 por Francisco de Paula Pérez, se ha especializado en la investigación y generación de contenidos periodísticos para diferentes plataformas en las que provee a las audiencias de piezas mult...

Este artículo fue curado por Santiago Ávila   Ago 6, 2024 - 2:20 pm
Visitar sitio

En su visión sobre la política energética actual de Colombia, el Centro Regional de Estudios de Energía (Cree) y el Centro de Estudios Económicos Anif presentaron sus visiones. Entre ellas está que, para los dos años venideros, se debe hacer una transición responsable y coherente con la realidad del país, que garantice seguridad en el suministro sin que haya un gran impacto fiscal.

(Lea también: Se armó problema con varios carros en Colombia y comerciantes saltaron; ¿de qué se trata?)

José Ignacio López, presidente de Anif, se refirió a las implicaciones macroeconómicas que tiene la transición energética en Colombia. Según el directivo, “estamos lejos de alcanzar las metas deseadas en transición energética, y estamos hablando de un sector (el de hidrocarburos) que representa el 18 % del recaudo total por impuesto a la renta a personas jurídicas, y cuyas regalías representan el 1% del PIB anual”.

De igual manera, López presentó un análisis sobre lo que se necesitaría en términos reales para reemplazar los ingresos fiscales del sector hidrocarburos en caso de que se desee cortar de golpe su producción.

En su análisis comparativo, reemplazar esos recursos implicaría aumentar el IVA del 19 % al 25 %, o que el turismo se quintuplique y lleguen al país 27,4 millones de turistas, con un gasto de US $ 1.472 dólares por cada visitante.

Desde Anif destacaron que la transición energética es un reto y una gran oportunidad para Colombia, pero que esta no puede hacerse poniendo en riesgo la sostenibilidad fiscal del país, por lo que debe hacerse de manera gradual sin desconocer los impactos macroeconómicos que puede traer consigo.

(Vea también: Colombianos que la embarren con declaración de renta tendrían multa, ¿pueden volverla a presentar?)

La situación del gas

“El gas no se ha acabado, lo que se está acabando es el gas barato”, declaró Tomás González, director del Cree, quien añadió que “actualmente el país tiene cuatro opciones: hacerlo offshore, importar LNG (gas natural licuado), traerlo de Venezuela o hacerlo con reservas contingentes no convencionales”.

De igual manera, el Centro Regional de Estudios de Energía expuso cinco acciones que se pueden tomar para mejorar la forma en la que se está llevando la transición energética.

La primera de ellas es el desarrollo de Programas de Interés Nacional Estratégico (Pines) enfocados en energía; como segundo punto está crear una reforma fiscal energética, enfocada en la sustitución de ingresos, eliminación de subsidios fósiles, focalización y una revisión de los precios del carbón.

Lea más: No se cumplirá la meta de inversión en exploración de petróleo y gas en Colombia: la dura advertencia de la ACP

También propuso fortalecer la Creg para hacerla independiente y técnica, enfocada en atraer inversión y promover la competencia; convocar a un diálogo sectorial que haga una evaluación realista; y actualizar el plan de adaptación sectorial para identificar y evaluar medidas.

Frente a la situación relacionada a la posibilidad de traer gas de Venezuela, desde el Cree afirmaron que es una “opción con dificultades e incertidumbres a raíz de las sanciones internacionales, que podrían mantenerse o endurecerse tras la situación generada tras las elecciones pasadas, a lo que se suma la necesidad de reparar la infraestructura y garantizar que el gas está en condiciones técnicas para ser traído al país.

* Pulzo.com se escribe con Z

Lee todas las noticias de economía hoy aquí.