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Valora Analitik conoció que varias empresas, a las que se les había adjudicado el Cargo por Confiabilidad en la subasta de 2019 -que tenían Obligaciones de Energía Firme con nuevos proyectos energéticos-, por no entrar en operaciones en las fechas estipuladas perdieron el cargo entregado por el Estado colombiano.
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Fuentes le revelaron a este medio de comunicación que en la subasta de 2019 se asignaron diversos proyectos de energía que debían empezar a operar en 2022 o, en su defecto, en 2023 -como máximo- ya que tenían plazo de un año -que sirve de colchón ante cualquier tipo de improviso-.
“Han pasado diversas circunstancias porque hay proyectos que sí se han construido y que ya están operando. Hay otros proyectos que sufrieron retrasos que los superaron y están entrando o están intentando entrar (como Termocandelaria). Un ejemplo de ello es Hidroituango”, destacó la fuente que pidió no ser mencionada.
Agregó que, curiosamente, los que han tenido mayores retos han sido los proyectos de energías renovables no convencionales que estaban proyectados para operar en La Guajira y los que dependen de la expansión de las redes de transmisión.
“Ahí hay una problemática social de licenciamiento que es difícil y que ha tenido efecto sobre éstas: algunas lo han manejado a través de una figura regulatoria que es ceder sus obligaciones por un periodo mientras pueden terminar la construcción de sus proyectos”, señaló la fuente.
Ahora bien, en realidad no es posible decir que todos los proyectos del cargo están retrasados o no entraron.
De acuerdo con la fuente de Valora Analitik, un 30 % de las empresas a las que les fueron adjudicados los proyectos de energía de Cargo por Confiabilidad han perdido este recurso.
“En términos de la energía en firme -que es el atributo que se hace en el cargo- por ahí el 30 % aproximadamente. No es un porcentaje bajo, pero hay que decir que la tasa de éxito de las subastas nunca es el 100 %”, aclaró.
Añadió que “hay una, llamémoslo así, una mortandad normal de los proyectos que se construyen. No todos llegan al completamiento a la fecha que es y, podría decirse, que en esta subasta pasó lo mismo”, aclaró.
Valora Analitik consultó a la Asociación Colombiana de Generadores de Energía Eléctrica (Acolgen) sobre este tema y la presidente del gremio, Natalia Gutiérrez, precisó que de las plantas nuevas que salieron asignadas en la subasta de Cargo por Confiabilidad de 2019 vemos que el 53 % perdió la capacidad.
Lo anterior, dado que no aparecen con Obligaciones de Energía Firme en los últimos datos publicados por XM, con corte al diez de agosto de 2023.
“Esta es una señal compleja de cara a la expansión que requiere el sistema para garantizar la adecuada cobertura de la demanda en el mediano plazo”, manifestó Gutiérrez.
Uno de los proyectos que perdió el Cargo por Confiabilidad de 2019
Tumawind y Chemesky son dos proyectos eólicos de Enel Green Power, línea de negocio de Enel Colombia, una de las empresas que más dinero gana en su sector, que fueron adjudicados bajo el mecanismo de expansión de la subasta del Cargo por Confiabilidad realizada en 2019.
Debido, principalmente, a las condiciones de atraso e incertidumbre de la línea de conexión a la cual se conectan (Línea de Transmisión Colectora) y aunque se buscaron todas las alternativas de mercado y regulatorias disponibles para mantener los compromisos adquiridos en dicha subasta, la compañía tomó la decisión de perder las asignaciones de Obligaciones de Energía Firme, asignadas en dicha subasta, para 20 años.
Cabe destacar que ambos proyectos, actualmente se encuentran en etapa de desarrollo, adelantando los procesos de consulta previa y licenciamiento ambiental, y están sujetos a la entrada en operación de la Línea de Transmisión Colectora (500 kV) que ejecuta el Grupo Energía Bogotá (GEB).
Por lo anterior, su cronograma constructivo se irá evaluando conforme avance esta línea de transmisión y considerando la coyuntura del territorio, que representa grandes retos para el avance y la sostenibilidad de este tipo de proyectos.
Asimismo, se está a la espera de una regulación definitiva en materia de garantías de conexión.
Enel Green Power continuará enfocando sus esfuerzos en la construcción de proyectos solares por cerca de 800 megavatios (MW) en los departamentos del Atlántico, Magdalena y Cesar, que se sumarán a los 3.800 MW de energía renovable que la Enel tiene en Colombia y Centroamérica.
Subasta de Cargo por Confiabilidad de 2019
El operador del Sistema Interconectado Nacional (SIN), XM, informó en marzo de 2019 que 70 proyectos de energía se adjudicaron en la subasta de Cargo por Confiabilidad.
La entonces ministra de Minas y Energía de Colombia, María Fernanda Suárez, destacó en su momento que el fin de este ejercicio le apuntaba a que los colombianos tuvieran energía confiable, pese a escenarios de incertidumbre. Incluso la cartera anunció que se garantizaba la energía firme en 2022 – 2023.
(Vea también: Avance clave en Colombia en la transición a energías limpias; cifras sorprenden)
En esa oportunidad, se adjudicaron 1.398 megavatios de energía solar y eólica. Se presentaron 80 plantas, las cuales 70 se quedaron con contratos: 47 ya existentes y el resto nuevas.
Vale destacar que se asignaron 250 gigavatios de energía en la subasta de Cargo por Confiabilidad. De ese total, 37 gigavatios son de proyectos nuevos. Entre las empresas ganadoras de la puja estuvieron: Isagen, Celsia, Epsa, EPM y Enel Green Power Colombia.
Hay que decir que el cargo por confiabilidad, de acuerdo con XM, es un esquema de remuneración que permite hacer viable la inversión en los recursos de generación eléctrica, necesarios para garantizar de manera eficiente la atención de la demanda de energía en condiciones críticas de abastecimiento.
Lo anterior, a través de señales de largo plazo y la estabilización de los ingresos del generador.
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