Compensar, Sanitas y Sura tienen millones de pacientes en bases de datos, los mismos que se verían afectados porque, por cuenta de una medida de emergencia, estas entidades prestadoras de salud tendrían parar operaciones. Las tres le comunicaron al Gobierno que tienen problemas de viabilidad financiera.
La problemática de estas 3 EPS es tal que, según dice la misiva, desde septiembre ven dificultades para operar en Colombia. La comunicación, enviada al ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, señala lo siguiente:
“Es nuestra intención y responsabilidad presentarle a usted, de primera mano, la difícil y angustiosa situación financiera que atraviesa nuestro sistema de salud y, así mismo, manifestarle la gran preocupación de viabilidad que hoy enfrentamos como EPS serias, responsables y comprometidas con el cuidado y el bienestar de la población”, dice la carta de las EPS con millones de usuarios en Colombia, replicada por el diario Portafolio.
La carta enviada desata gran preocupación no solo entre los pacientes afiliados a estas entidades, sino a toda la cadena de proveedores y empresas que dependen de su normal funcionamiento. En sus argumentos, las tres EPS exponen situaciones que tienen en vilo la sostenibilidad de las finanzas del sistema actual.
(Vea también: Supersalud dio gran noticia a EPS a la que están afiliados millones de colombianos)
Compensar, Sura y Sanitas podrían dejar de funcionar: hay 3 explicaciones
El primer argumento que dan las entidades mencionadas tiene que ver el valor de la UPC (Unidad de pago por capitación), que consideran que es insuficiente para responder por los beneficios en salud.
“Los recursos asignados en el presupuesto general de la Nación no alcanzan a cubrir las necesidades generales del sistema. Se estima que el valor de la UPC en 2022 fue insuficiente en un 8 % respecto al incremento del valor de los servicios cubiertos por el PBS. El ajuste de la UPC en 2023 no corrigió ese problema, para hacerlo ha debido tener un ajuste adicional del 5,7 %”, señalan las entidades con base en un estudio de Suficiencia de la UPC de la Universidad EAFIT.
El segundo argumento expuesto se relaciona con la redistribución de recursos entre los actores del sistema.
“Al no ajustar la UPC por condiciones de salud (perfil epidemiológico), varias EPS presentan problemas de solvencia como consecuencia de esta concentración asimétrica de cargas de enfermedad. Las EPS con menor carga de siniestralidad presentan mejores resultados financieros. El ajuste de la UPC por condiciones de salud no significa un aumento o disminución global de la UPC promedio del sector, supone una distribución equitativa de los recursos entre los actores responsables (efecto suma cero)”, dice la misiva que enviaron Compensar, Sura y Sanitas al ministro Jaramillo.
Además, dan un tercer argumento que tiene que ver con el pago de deudas que se relacionan con el manejo de la pandemia de Covid-19, las licencias e incapacidades, entre otros.
Finalmente, las EPS alertan al Gobierno para que se tomen las medidas necesarias para garantizar su viabilidad financiera y seguir funcionando y prestando sus servicios con normalidad en Colombia. De lo contrario, dicen, sería imposible cumplir con sus operaciones y ponen un plazo máximo de septiembre de 2023.
“Nos veríamos en la necesidad de convocar a nuestras juntas directivas para evaluar los posibles escenarios que como Gobierno nos plantean y tomar las respectivas decisiones del caso“, dicen las EPS en la carta.
“Es necesario mencionar que tanto Sura como Sanitas y Compensar no cumplirían con los indicadores financieros al finalizar el año en curso, pues en los últimos dos años se ha agotado un capital cercano a los 400.000 millones de pesos, en el caso de Sura; 415.500 millones, en el caso de Sanitas; y 278.700 para Compensar, los cuales fueron construidos durante los 30 años y 23 años de su existencia”, sentencian.
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