América Latina y el Caribe está rezagada en los esfuerzos para incluir más tecnologías digitales en el transporte, lo que destaca una gran oportunidad para impulsar la economía en un sector clave de la región, según concluye un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo.

A pesar de los esfuerzos de algunos gobiernos de la región para una mejor política pública de transformación digital en transporte, un 40 % de las agencias públicas del sector de transporte tienen pendiente elaborar una estrategia de transformación digital, mientras que para el sector privado la cifra es de 27 %.

Esta es una de las grandes conclusiones de la investigación Impulsando la transformación digital del transporte en América Latina y el Caribe, realizada por el BID entre 2021 y 2022, para la cual se revisaron alrededor de 300 documentos públicos, privados y académicos, y se realizaron encuestas a 223 empresarios del sector transporte en la región y 96 entrevistas a líderes de todo el mundo.

(Vea también: Adultos jóvenes tienen más riesgo de morir por COVID-19 en Latinoamérica que en países ricos)

El estudio realizado en conjunto con el Instituto de Columbia para la Tele-información, encontró que dos de cada tres organizaciones ya tienen una estrategia de transformación digital, mientras que en 2019 apenas tenían conocimiento del tema. Sin embargo, 43 % de los encuestados reconocen estar rezagados o muy rezagados frente al promedio de América Latina y el Caribe. Esta cifra asciende al 67 % cuando se comparan con países líderes a nivel mundial.

Como estipulado en la Visión 2025 del Grupo BID, la transformación digital presenta una oportunidad única para trabajar en conjunto desde los sectores públicos y privados de transporte, y lograr la recuperación económica inclusiva y sostenible.

Cómo alcanzar esta transformación

  • El estudio recomienda, que desde las agencias públicas se generen estrategias de transformación digital para el transporte y sus diferentes modos, contando con la participación del sector privado en su elaboración e implementación.
  • También recomienda trabajar en proyectos demostrativos de los beneficios de la transformación digital, a fin de superar la resistencia al cambio, fomentar la colaboración público-privada y preparar las políticas para el despliegue a gran escala de nuevas tecnologías como vehículos eléctricos y autónomos, Internet de las Cosas e inteligencia artificial.
  • Asimismo, la investigación identifica la necesidad de capacitar al recurso humano y contar con profesionales que tengan experiencia en el manejo de tecnologías digitales avanzadas.
Lee También

Una hoja de ruta hacia la transformación digital del sector

El BID recomienda aunar esfuerzos desde las políticas públicas para incentivar la transformación digital del transporte, a su vez que se catalizan estas transformaciones para reducir las emisiones del sector de manera a abordar el cambio climático.

En efecto, se estima que para 2025 la inteligencia artificial y las tecnologías para la reducción de emisiones seguirán cobrando importancia. Si bien la región se encuentra en una primera fase de la transformación digital, es fundamental considerar mayores inversiones para apalancar los beneficios de las nuevas tecnologías en materia de competitividad y sostenibilidad. La modernización digital del sector demanda un mayor esfuerzo, compromiso y cooperación de los gobiernos, empresas y de la academia, para tomar acciones que contribuyan a la construcción de futuros prósperos y sostenibles.

Para ello, será necesario impulsar un cambio cultural y de capacidades en las instituciones públicas, y fomentar alianzas con las instituciones nacionales, regionales y locales, crear incentivos a la inversión tecnológica, o fortalecerlos en los países que ya se tienen, y abrir espacios para buscar alternativas conjuntas que permitan avanzar.

Desarrolladores del estudio

Impulsando la transformación digital del transporte en América Latina y el Caribe ha sido posible gracias a la colaboración del BID, junto con Foro Económico Mundial (FEM), de la Asociación Americana de Autoridades Portuaria (AAPA), la Asociación Latinoamericana de Transporte Aéreo (ALTA), la Comisión Latinoamericana de Aviación Civil (CLAC), la Unión Internacional de Transporte por Carretera (IRU, por sus siglas en inglés), Intel, y Microsoft.

Conozca todo el contenido del estudio del BID, descargándolo aquí.