Francia tendrá dos retos en el Mundial de Catar: enfrentarse a las mejores selecciones del mundo y romper la ‘maldición del campeón”.
Estamos a pocos días del arranque del torneo de fútbol más importante del mundo, el cual se disputará en Catar. El actual campeón del Mundial deberá superar una maldición que se viene presentando en las últimas tres ediciones de esta competencia.
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La temible mufa consiste en que, el actual campeón, queda por fuera en fase de grupos, teniendo un rendimiento deportivo desastroso.
Los países que han sufrido de este mito son: Italia (campeón 2006), España (campeón 2010) y Alemania (campeón 2014). La delegación gala estará acompañada por Australia, Dinamarca y Túnez en el Grupo D, y aunque al parecer son rivales de ribetes menores, en el fútbol todo se vale y nada está escrito.
Con Mbappé, Griezmann y Benzema a la cabeza del proyecto deportivo francés, los aficionados nacidos en dicho país se sienten tranquilos y creen en la buena participación de su seleccionado en el Mundial de Catar, ya que sería increíble ver a este seleccionado ser eliminado en la primera ronda de la cita mundialista.
Lo peor del caso es que Francia ya ha sufrido de esta ‘maldición’: Posteriormente de coronarse campeón del Mundial de 1998, los azules dieron mucho de que hablar tras su fracasada participación en el Mundial de 2002, consiguieron un solo punto en el Grupo A, el cual complementaban Uruguay, Senegal y Dinamarca.
No está de más mencionar que el campeón defensor no pudo marcar un solo gol en tierras asiáticas.
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