De acuerdo con Jeffrey Dugas, médico que trabaja con la empresa, se trata de un luchador en formación que hacía parte del escaso público que desde hace algunas semanas había sido autorizado para presenciar los combates, señaló Mediotiempo.com.
Sin embargo, el nombre del afectado no fue publicado, como tampoco se dijo cuál fue la otra persona afectada por el virus.
Pese a que los positivos se conocieron el 9 de junio, nadie más ha presentado síntomas, agregó el medio. Sin embargo, el doctor en cuestión anunció exámenes para todos aquellos que estuvieron desde entonces en el ‘Performance Center’, lugar de las grabaciones.
Desde que la pandemia llegó a Estados Unidos, todas las luchas se han llevado a cabo en Orlando, Florida, estado que autorizó a la WWE a seguir desarrollando su actividad por considerarla “servicio esencial“, aunque a puerta cerrada.
No obstante, las más recientes emisiones tuvieron a algunos espectadores [luchadores de categorías de formación] alrededor del ring y separados del mismo por acrílicos.
Esta situación terminó dándole entrada al virus, pues ninguno de los asistentes usaba tapabocas ni respetaba el distanciamiento social, como se podía ver en las imágenes.
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