Desde el inicio del mercado de fichajes en el fútbol colombiano, el Junior de Barranquilla se ha estado moviendo para renovar su plantilla. Al equipo han arribado Amuri Torralvo, Iván Scarpeta, Vladimir Hernández, Brayan León, Leider Berrio, Carlos Sierra y Edwin Herrera.

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Pero por otro lado, hay una situación que preocupa, y que se ha vuelto una tendencia en el ‘Tiburón’ durante este mercado de transferencias.

Además de estos jugadores que ya llegaron, hay otros nombres que estuvieron a punto de firmar con el club pero al final dichas operaciones no se terminaron dando. Marlon Torres, Jesús Hernández, Germán Gutiérrez y ahora Rafael Pérez tenían todo acordado para vestirse con la rojiblanca.

Pero hay una situación que coincide en la negocios de los cuatro, y aunque al principio parecía casos particulares, con el pasar de los días y al conocer las versiones de los futbolistas, este caso se vuelve dudoso.

Torres, Gutiérrez, Hernández y Pérez ya habían llegado a un acuerdo económico para firmar contrato con el cuadro de ‘Curramba’. Sin embargo, a la hora de realizarse los exámenes médicos, ninguno de ellos pudo superarlos. Este fue el principal motivo para que no se dieran dichas incorporaciones.

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Pero el problema va más allá de esto, pues uno de ellos salió a hablar de este inconveniente, y acusó al cuerpo médico juniorista de mentir. En las últimas horas el defensa Rafael Pérez se pronunció al respecto y dejó muy mal parada a la institución barranquillera.

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El exjugador de Talleres de Córdoba, realizó una entrevista en la que aseguró que estaba en óptimas condiciones físicas. Además agregó que el diagnóstico entregado por el médico del ‘Tiburón’ es totalmente falso y estaría afectado su futuro en el fútbol profesional.

Con este antecedente se da paso a las especulaciones sobre la excusa que estaría utilizando el Junior de Barranquilla para no contratar jugadores.

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