Peláez escuchó atentamente las graves denuncias que hizo este martes el árbitro Harold Perilla, a través de W Radio, en las que señaló a los exárbitros Óscar Julián Ruiz e Ímer Machado de presunto acoso sexual y laboral.
A raíz de estos señalamientos, el ‘profe’ Peláez se despachó en contra de la dirigencia del fútbol colombiano, pues Perilla aseguró en la emisora que aunque reportó su caso a la “comisión técnica” nunca se tomaron correctivos.
“Mire, Vicky (Dávila), dicen que el fútbol es el reflejo de la sociedad, y hoy más que nuca es cierto. La corrupción que ronda en todos los rincones de Colombia también está en el fútbol. Quizá los jugadores sean los menos, pero lo que acabamos de escuchar del arbitraje, que desde hace rato se conocía y lo han manejado ahí con disimulo, nos demuestra que la cúpula que maneja el fútbol en Colombia está contaminada con sida”.
Peláez cuestionó que en este tipo de situaciones se ponen en juego las aspiraciones de quienes sueñan con ser árbitros Fifa, ya que Perilla aseguró que además de los supuestos acosos también le exigieron dinero a cambio de ponerlo a pitar partidos.
“El señor Ímer Machado nunca fue ejemplo de buen árbitro. Siempre fue cuestionado. Y cuando era árbitro hacía unos asados espectaculares. Se retiró… pero sale de un momento a otro a manejar, a controlar árbitros. Y ahora, un gran conocido como Óscar Julián Ruiz, también sigue metiendo la mano en la designación de árbitros. Por eso, muchos equipos protestan por los arbitrajes…”, agregó Peláez.
El periodista cerró su intervención con críticas hacia “las comisiones evaluadoras” por no hacer un seguimiento serio al desempeño arbitral, y porque en Colombia “el arbitraje nunca fue profesionalizado” pese a recomendaciones de la Fifa.
Esta, según Peláez, es “la gran falla” que afecta hoy al fútbol colombiano, sumada a los demás escándalos que se han destapado por estos días: “Tenemos problemas en selección femenina, reventa de boletas, manejo arbitral en mala condición, déficit en varios equipos por un dinero que les prometieron y que todavía no les llegó”.
Finalmente, el periodista opinó que los “equipos” deben “ponerse serios” y pedir que se cambie a quienes conforman esa cúpula por “gente que quiera trabajar de manera decente”.
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