Hace aproximadamente cinco años la vallenata Andrea Estefanía Cañón Batista reinaba en las pistas del patinódromo Parque Deportivo de Santa Marta y se colgaba dos medallas de oro en los Juegos Bolivarianos 2017.
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Esa formidable presentación, Andrea quería repetirla en el patinódromo Elías Ochoa Daza, escenario que la vio nacer como deportista. Sin embargo, hace una semana, un comunicado de la Federación Colombiana de Patinaje le dio la más tristes de las noticias: no correrá en su tierra natal para los Juegos Bolivarianos Valledupar 2022.
“La verdad tengo un sinsabor muy grande, al saber que teniendo el Cesar dos cartas representativas ninguna va a estar en los Juegos; no sé si fue falta de comunicación, pero desafortunadamente no estaremos ni Aramis Campo ni yo, en la delegación que estará este año en los Bolivarianos”, dijo Cañón Batista en conversación con El Pilón.
Para la múltiple campeona mundial, ganar una dorada bolivariana en casa hubiese sido “extraordinario” y lamentó la decisión del cuerpo técnico tricolor.
“Uno siempre va a querer dar lo mejor para su ciudad y hubiese sido lindo representar a Colombia en mi tierra, hubiese sido una locura ganarse una medalla de oro en Valledupar, algo extraordinario, pero el tiempo de Dios es perfecto, será en otra oportunidad”, puntualizó Cañón.
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En las pasadas justas bolivarianas, la patinadora se adjudicó doblete dorado en los 300 metros contrarreloj individual y los 100 metros velocidad carriles.
“Fue algo muy gratificante ver el trabajo que habías hecho todo el año, verlo reflejado en esas dos medallas, un logro más para tu pergamino, un evento superimportante y gracias a Dios se pudieron dar los resultados como era”, recuerda Cañón.
A pesar de la amarga noticia recibida, Cañón espera que su natal Valledupar haga unos buenos Bolivarianos. “Por otro lado estoy muy contenta porque Valledupar será conocida por los mejores deportistas de los países competidores, se vendrá una fiesta muy importante para el departamento y que bueno que sea aquí en nuestra ciudad”, puntualizó.
Cañón tiene en su palmarés 6 campeonatos mundiales, dos oros bolivarianos y un oro sudamericano, además de gran cantidad de medallas doradas en torneos nacionales.
Además de la deportista de 25 años, otro patinador que quedó por fuera del seleccionado bolivariano fue Aramis Campo, quien también aguardaba la esperanza de competir en su tierra.
Polémica decisión
La polémica decisión se dio el pasado 12 de mayo, cuando la Federación Colombiana de Patinaje entregó la nómina oficial de los integrantes de la selección de velocidad que representarán al país en los Bolivarianos Valledupar 2022 y allí no aparecieron los nombres de Cañón ni de Campo.
Ambos deportistas se encuentran ubicados en el tercer puesto del escalafón nacional, mientras que una de las convocadas, María Timms, de Cartagena, está ubicada en el puesto 11.
Es decir, como explicó a este medio un dirigente deportivo que prefirió reservar su identidad, “lo lógico es que las federaciones prioricen a los deportistas locales cuando estos tengan nivel de seleccionables”.
Sobre el tema, la presidenta de la Liga de Patinaje del Cesar, Claudia de Hoyos, se pronunció en desacuerdo con la decisión federativa.
“Aún me hago esa pregunta del porqué si el Cesar con dos deportistas en el escalafón, ambos en tercer lugar, caso Andrea Cañón y Aramis Campo, no fueron convocadas a la selección. En su momento se hizo la consulta por parte de la Secretaría de Deportes del Cesar y la Liga local a la Federación, pero dicha selección fue escogida a criterio técnico de la Federación y de su entrenador. Desconozco el criterio técnico del entrenador Elías del Valle y qué aspectos en cada deportista fueron tenidos en cuenta. Me parece insólito que siendo Valledupar la sede de los Bolivarianos no tenemos por lo menos en la banca nuestros deportistas”, dijo De Hoyos.
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