Entre figuras, historia y herencia: así mantiene Lenis Agudelo viva la tradición del pesebre en Colombia

El pesebre es una de las expresiones más emblemáticas de la Navidad en Colombia, presente durante diciembre en hogares, iglesias y espacios públicos. Esta tradición, que recrea el nacimiento de Jesús en Belén hace más de dos mil años, va más allá de ser solo una decoración: para muchos, representa un proyecto de vida y una herencia cultural que trasciende generaciones. Así lo demuestra la experiencia de Lenis Augusto Agudelo, destacado pesebrista cuyas detalladas creaciones pueden verse en diferentes localidades de Medellín y otros municipios de Antioquia, según narra el diario EL COLOMBIANO.

Lenis, nacido en Jericó, Antioquia, descubrió su pasión por el pesebrismo en la infancia. Su abuela paterna marcó ese camino: era una entusiasta de los pesebres y, hace siete décadas, su esposo viajaba largos trayectos desde Jericó hasta Medellín e incluso Bogotá, en busca de figuras importadas desde España, distribuidas por la congregación de los claretianos. Esta dedicación familiar permitió que la abuela reuniera más de 80 figuras artesanales, las mismas que, al morir, legó a Lenis para que preservara la tradición cada Navidad.

Sin embargo, el pesebrismo se transformó en un interés todavía más profundo para Lenis hace diez años, cuando decidió formarse de manera académica en la Corporación El Taller del Pesebre. A partir de ese momento, descubrió la complejidad inherente a esta labor: armar un pesebre no solo implica disponer figuras, sino investigar cuidadosamente aspectos históricos y geográficos de la época bíblica, como la vegetación, los oficios, la alimentación y las costumbres cotidianas, con el fin de ser fiel a los relatos de la Biblia. “Lo importante es conservar, ser fiel a lo que describe la Biblia y a toda esa parte histórica”, asegura Lenis a EL COLOMBIANO.

Este trabajo requiere meses de anticipación. Cada proyecto comienza hasta seis meses antes de diciembre, mientras Lenis planifica, investiga y diseña los elementos que conformarán la escena navideña. Sus obras en 2023 se exhiben en espacios destacados de Medellín, como el Parque Comercial El Tesoro, donde construyó un pesebre de 80 metros cuadrados con más de 200 figuras. Otros montajes, como el del Museo El Castillo y el Country Club, también llevan su sello, al igual que el elaborado pesebre presentado en el Museo Maja de Jericó, su pueblo natal.

La elaboración de cada pesebre inicia con la creación de un plano, que luego se adapta a la técnica preferida del artista. En el caso de Lenis, la madera tallada es el material predilecto para ensamblar las piezas principales de la composición. El proceso, detallado y laborioso, refleja tanto la pericia del pesebrista como el empeño por mantener vivo un legado centenario.

Mantener esta costumbre es más que un ejercicio estético: significa preservar una identidad cultural, que encuentra sus raíces en la escenificación creada por San Francisco de Asís hace más de 800 años en Greccio, Italia. Para Lenis, la verdadera esencia de la Navidad en Colombia no se halla en personajes como Papá Noel, sino en tradiciones propias como el pesebre, las luces y las velitas. En sus palabras, el pesebre representa un símbolo de encuentro y unión, capaz de convocar a familias y comunidades en torno a valores compartidos y recuerdos entrañables.

¿Qué caracteriza a los pesebres bíblicos en comparación con otras variantes?

El pesebrismo bíblico, como el que practica Lenis Augusto Agudelo, se distingue por su fidelidad a los detalles históricos y geográficos relatados en la Biblia. Estos pesebres buscan recrear con precisión la vida cotidiana de la época de Jesús, desde la vegetación, los oficios y las prendas, hasta los roles de cada figura y la distribución espacial de las escenas. El origen de este interés por la autenticidad radica en el deseo de honrar la tradición y transmitir un mensaje acorde al relato original, mientras que otras variantes pueden incorporar elementos modernos o locales, adaptándose a los gustos de cada familia o comunidad. Así, el pesebrismo bíblico no solo celebra la Navidad, sino que también invita a estudiar y comprender el contexto en que nació esta tradición universal.