Es por esto que se debe ofrecer un alimento concentrado que tenga las vitaminas necesarias para cada edad. Las mascotas necesitan para su sano desarrollo y mantenimiento vitamina A,D,E,K, que pertenecen al grupo de las liposolubles, y vitamina C y del complejo B, del grupo de las hidrosolubles.

Estas últimas vitaminas son necesarias para el mantenimiento de los huesos y tejidos, así como para una correcta modulación del sistema inmune. 

(Vea también: Cataratas, glaucoma y otras enfermedades oculares que puede prevenir en sus mascotas)

Para qué sirven las vitaminas en las mascotas

  • Vitamina C: es antioxidante y sirve para la formación de colágeno y un sistema vascular sano.
  • Vitaminas del Complejo B: buena para mantener un sistema nervioso sano, aporta energía a las células, ayuda a la formación de glóbulos rojos y al mantenimiento adecuado del sistema gastrointestinal.
  • Vitaminas liposolubles: son vitaminas que entran al organismo por la ingesta de comida, también son necesarias para tener un buen desarrollo y mantenimiento de todos los órganos.
  • Vitamina A: favorece el crecimiento óseo, visión correcta, protección de la piel, previene el envejecimiento celular, modulación del sistema inmune, entre otros.
  • Vitamina D: mantiene huesos sanos y fuertes, modulación del sistema inmune.
  • Vitamina E: es antioxidante, mantiene salud del pelo y previene la anemia.
  • Vitamina K: estimula una correcta coagulación.

La gran mayoría de alimentos concentrados tienen las vitaminas necesarias que la mascota necesita según su etapa de vida, estos pueden contener frutas, verduras y vegetales deshidratados que aportan dichas vitaminas.  

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Qué pasa si a las mascotas les dan vitaminas en exceso

Cuando las vitaminas exceden los niveles requeridos por el cuerpo, en muchos casos por ofrecer suplementos vitamínicos sin prescripción médica, se puede alterar la salud de las mascotas agravando ciertas enfermedades y causando deformidad en huesos y tejidos.

Algunos síntomas por exceso de vitaminas son:

  • Vómitos.
  • Diarreas.
  • Cojeras.
  • Dolor de cuello, en donde las mascotas no pueden girar o mover la cabeza.
  • Debilidad.
  • No coordina sus movimientos.
  • Anemia.
  • Agresividad.
  • Alteración en el funcionamiento hepático.
  • Cálculos renales.
  • Ansiedad.
  • Insomnio.
  • Calcificaciones.

Es por esto que no es recomendable dar vitaminas adicionales a la dieta, si no son prescritas por el médico veterinario, sobre todo en cachorros y geriátricos.

Dr. Carlos Cifuentes

M.V. U. de la Salle

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