Hoy vamos a hacer un ejemplo muy sencillo. Empiezo explicando con mi camiseta. Aquí tengo unos miquitos que dicen: no veo, no escucho, no hablo.

Alguien, al no saber de los términos, podría decir: el ciego, el cieguito, el sordo, el mudo. No son los términos adecuados.

Alguna vez me publicaron una entrevista en una importante revista, y decía «Felipe hace inventos para discapacitados», ese terminó «discapacitados «ofende mucho, no es el término adecuado, no se debe usar. Entonces ¿Cuál es el término adecuado?

(Vea también: Personas con discapacidad ya pueden operar teléfonos Android con gestos faciales)

Voy a dar un ejemplo sencillo: ustedes ven una persona que va en una silla de ruedas pasando por el frente, y quieren decir algo sobre ella: ¿ahí va el inválido? No, mal término.

¿Discapacitado? ¡No! Todos los términos malos, negativos, como inválido, minusválido, lisiado o mongólico, entre otros, están prohibidos y prácticamente equivalen a un insulto muy fuerte. ¡Evítelos!

Pero les voy a dar un dato. Antes de pensar si la palabra es movilidad reducida, nos enseñan que con respeto se debe decir persona + el tipo de discapacidad. Persona con discapacidad física, persona con discapacidad visual, persona con discapacidad cognitiva, persona con discapacidad auditiva, persona con discapacidad intelectual.

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Se supone que eso es lo ideal,  lo más ‘perfecto’; nos dicen que son los términos que actualmente se deben usar, pero igual encontrarás personas que también critiquen esos términos.

¿Pero saben cuál es la mejor forma de referirse a mí si yo pierdo la movilidad en mis piernas? La forma es muy sencilla, yo me sigo llamando Felipe.

Felipe es el mismo si no puede ver, si no puede escuchar, si no puede caminar. Felipe, la persona, el respeto, valorar al otro como ser humano.

Entonces simplemente yo me siento con Felipe a tomar una cerveza, así él no pueda ver; van a ser las mismas historias, nos vamos a reír igual, vamos a molestar, le voy a decir que la mesera está bonita, más de una cosa de la otra; ¡o sea, es lo mismo!

Entonces lo principal para aprender sobre inclusión es tratar a los demás, incluyendo si es una persona con discapacidad o adulto mayor, como a cualquier persona.

Ese es el mensaje que les quería dejar hoy, cortico, al grano: respetemos a la persona, podemos manejar el término adecuado, sí podemos. Lo ideal es llamarlo por su nombre, respetemos la persona. Mucho gusto, Felipe Betancur desde Medellín – Colombia.